En septiembre encargamos una mampara de baño con una característica imprescindible, no debía ser necesario coger la mampara con un brazo para fijarla a la pared, en la tienda donde la preguntamos nos comentó que lo hablaría con el comercial de la empresa de mamparas y nos diría algo, a los pocos días nos llamaron de la tienda indicando que la empresa de mamparas había dicho que sí, con esta confirmación decidimos comprar la mampara. A los pocos días se pasó una persona de la fábrica de mamparas “VITAL bath” a medir, pedimos una mampara con una altura de 1,95 metros, ya que en la parte alta de la pared del cuarto de baño hay una especie de cenefa de madera que sobresale de la pared, con lo cual la mampara no puede ser más alta, así mismo esta persona vio que mido más de 2 metros, con lo que quedó muy claro que la mampara no podía tener la barra de fijación a la pared.Cuando nos instalaron la mampara quedó claro que no era lo que habíamos pedido ya que se movía excesivamente, la instalación consistía en una guía atornillada a la pared y la mampara insertada en ella, tenemos dos niñas pequeñas, por lo que por temas de seguridad indicamos que eso no era lo que habíamos pedido, se personó el comercial de VITAL bath y dijo que esa fijación a la pared no era, que se habían equivocado, a los días nos instalaron otra guía, pero esta sujetaba la mampara mediante unos tornillos, hemos vuelto a notificar que este sistema tampoco es seguro ya que al igual que la otra se mueve excesivamente y ahora me dicen que todas las mamparas necesitan el brazo de sujeción a la pared, a la reclamación de que no es lo que nos habían indicado, ya que yo mido más de 2 metros y la mampara 1,95 metros y la barra a la pared me impediría ducharme con comodidad, me indican “pues tu veras”.Da la casualidad que todavía conservo la mampara original, la cual no tenía brazo de sujeción ya que el sistema de sujeción a la pared es mediante una L que agarra la mampara directamente a la pared, sin ninguna guía y sin ningún movimiento.