Siendo contratante de un seguro a todo riesgo de la compañía, mi vehículo se ve implicado en un accidente el pasado 16 de marzo. Contacta conmigo la gestora en esa semana por vía telefónica para indicarme que los daños peritados de mi vehículo son superiores a 18.000 euros, y que este se declara siniestro. Me informa de que la compañía me ofrece una indemnización neta de 13.100 euros, una vez se restan los 150 euros de franquicia.
Por mi trabajo, me es imposible gestionar telefónicamente el resto del proceso, por lo que acordamos continuar las gestiones por correo electrónico. Quedando constancia escrita de que acepto la indemnización, e indicando la cifra de 13.100 euros, la agente me pone en contacto con un desguace colaborador, que me envía una documentación a rellenar.
Al finalizar el trámite con el desguace, una grúa enviada por este recoge mi vehículo del taller colaborador en el que se encontraba.
Tras esto, los intentos de contacto con la agente son infructuosos, me indica por correo que no quiere hablar por escrito porque esto da lugar a "confusiones", que ellos no me deben nada, y que contacte con el desguace. Tras lo cual, me solicita que no contacte más con ella.
A fecha de redacción de esta reclamación, Línea Directa Aseguradora ha sustraído mi vehículo, no se me ha proporcionado ninguna documentación de baja del mismo, ni se me ha abonado la indemnización pactada correspondiente de 13100 euros, que recoge la poliza de mi seguro en el artículo 37 de la misma.
Cuando intento contactar con la aseguradora, me remiten a que me comunique con la agente que lleva mi caso, y esta se niega a continuar la contactar conmigo, y tiene claras reticencias a comunicarse por escrito.
Por ello, exijo la entrega de la documentación firmada y rellenada por la compañía de desguaces de transferencia de vehículo y de baja del mismo, y el abono inmediato de la indemnización correspondiente, reservándome el derecho a iniciar un proceso legal de muy difícil defensa para la aseguradora, ya que su agente ha dejado constancia escrita desde su correo profesional de la aceptación de la indemnización, de la indicación de los trámites a seguir para recibir la misma, y después de su negativa a continuar comunicándose conmigo y de continuar la gestión del incidente.