El lunes 2, a través de la web de uber eats, hice un pedido (total 23 euros) programado a Almalibre que debería haber recibido el martes 3 de junio entre las 17 y las 17:30.
El Martes 3 recibí una llamada antes de la entrega informando de que mi pedido estaba en camino. Fui al punto de entrega (mi patio) y controlé el trayecto en el mapa. Tras 40 min de espera, diciendo constantemente en el mapa que estaban a 1 o 2 min, el pedido cambio a entregado, siendo mentira porque yo nunca lo recibí.
Además, me puse en contacto con su chat de atención al cliente, ya que no ofrecen servicio de télefono, y solo me dijeron que no me devolvían el dinero y que lo sentían.
Finalmente, tras haberme cobrado ya los 23 euros el lunes, desde el martes me han intentado cobrar la misma cantidad 2 veces.