Después de haber pagado a Leroy Merlín Valladolid íntegramente unas ventanas y su instalación el día 25 de junio, sigo a la espera de que fijen una fecha para completar esa instalación (la fecha inicial acordada fue ¡¡el 12 de agosto!!) y poder cumplimentar los permisos que el Ayuntamiento requiere.
He hecho docenas de llamadas, nos hemos personado físicamente en la tienda de Valladolid a costa de tener que ausentarme del trabajo (vivimos en Burgos), he enviado correos electrónicos al responsable del servicio de ventanas, en una llamada totalmente ineficiente han dicho que hacían incidencia del asunto (van 3) y no hemos obtenido ninguna respuesta.
Nadie responde, nadie se responsabiliza de nada, todos se pasan la pelota sin que haya una solución. Dicen que la empresa está en Santander y el instalador en Palencia, mientras pasan los meses y las ventanas siguen en la vivienda sin ser instaladas.
Una vergüenza que está acabando con nuestros nervios.