Hechos acontecidosEl día 16 de agosto a las 18:06 tuve una colisión con la conductora de otro vehículo la cual se saltó un ceda el paso. El parte fue amistoso asumiendo la conductora del otro vehículo su culpabilidad. Los daños sufridos en mi vehículo fueron en la parte delantera derecha de mi vehículo, afectando a la puerta del copiloto (bloqueo), faro, rueda y trapecio derecho, etc. Contacté con mi seguro para obtener la recomendación de un taller y me recomendaron Talleres Riscal. Tras una semana de espera por mi parte después del accidente me decido a contactar con el taller para conocer el estado de mi vehículo. El taller me comunica que el peritaje no ha tenido lugar debido a que no hay compromiso de pago. Me resulta extraño que me digan que el peritaje no se realice sin el compromiso de pago, ya que es necesario para que tenga lugar dicho compromiso de pago.Aun así contacto nuevamente con mi aseguradora -Genesis- y efectivamente me confirman que sin peritaje no pueden obtener dicho compromiso de pago y que ya se encargaban ellos de contactar con el taller para que lo realizara.Se soluciona el asunto del peritaje de daños y espero pacientemente un mes para volver a contactar e informarme sobre el estado de mi vehículo. El taller me indica que ya contactarían ellos conmigo cuando la reparación se hubiese realizado. Les pido el informe pericial para saber el nivel de daños en mi vehículo y me indican que no pueden facilitármelo hasta que no se realice el cierre de peritaje ya que esto puede variar en función de la evolución de la reparación.El viernes 14 de septiembre recibo una llamada de la señorita Paz y/o Mónica (he mantenido conversaciones con ambas personas) del taller comunicándome que mi vehículo estaría listo el lunes 17 de septiembre, y que me volverían a llamar confirmándome su recogida dado que lo único que faltaba por realizar era la alineación de las ruedas. Pregunto ¿Está todo bien? y en tono bromista me dice la señorita ¡que va mujer te lo hemos arreglado a medias!, jaja, ya lo verás que está muy bienNo recibo tal llamada el lunes 17 de septiembre. Recibo una llamada el miércoles 19 de septiembre por la tarde comunicándome que mi vehículo ya está reparado y listo recalcando que funciona perfectamente y que todo estaba solucionado por lo que puedo pasar a recogerlo al día siguiente antes de las 19.00h (su hora de cierre).Al día siguiente, jueves 20 de septiembre, recibo nuevamente una llamada de la misma señorita donde me comunica con estas palabras: el vehículo no se mueve porque no funcionan las marchas, solo funciona la marcha atrás y le llamaba para darle presupuesto para el cambio de la caja de cambios. Le pregunto que es lo que ha pasado para que no habiendo pasado ni 24 horas me llamen de nuevo con esta nueva noticia que achacan a un desgaste. No me da respuesta y me dice de muy malas formas que si no iba a arreglarlo que volviese a llamar a mi seguro para que enviasen una grúa y se llevasen el coche. Contacto nuevamente con mi seguro para comunicarle todo lo que acabo de transcribir en relación a la llamada con la señorita del taller y se sorprenden que me comunicasen desde el taller que podía recoger el vehículo cuando aún no se había realizado el cierre de peritaje por parte de ellos (mi aseguradora).Llegados a este punto envían un perito para comprobar que es lo que ha ocurrido y de nuevo, por iniciativa mía contacto para obtener información. Me confirman algo que yo ya sabía, el problema de la caja de cambios no es fruto del siniestro. El vehículo subió a la grúa con las marchas en condiciones y funcionando perfectamente, algo que ya indiqué previamente antes de que se enviase al perito. Aun así, no me dan ninguna solución, ni asesoramiento ni información ni por parte del seguro ni por parte del taller que no asume su responsabilidad de algo que ha sido dañado durante la permanencia del vehículo en el taller. Las consecuencias de lo que ha ocurrido es que mi vehículo no se puede mover del taller porque la caja de cambios se ha roto en el periodo que ha estado en el taller. Yo no volví a ver mi vehículo desde el día del siniestro, el 16 de agosto.El taller insiste en que soy yo quien debe asumir el coste de un daño que yo no he provocado. He tratado de resolverlo a través de mi seguro Génesis pero no me ofrecen ninguna solución.