La agencia Servicheck fue mediadora para el alquiler del piso donde actualmente resido con Sandra Perez Gascón y Rodrigo Lubián Martínez. Se nos cito en la Comunidad de Madrid el día 30 de Marzo de 2015 a las 15:00h para la firma de dicho contrato. Quedándonos sólo un día para entregar las llaves de nuestro antiguo inmueble.Previo a la cita, solicite al agente que había mediado en el alquiler que me enviara copia para leerlo detenidamente. Estaba de acuerdo con todas esas cláusulas.El día de la firma dicho agente no se presento, sólo uno de los propietarios del inmueble y sus padres.Firmé el contrato segura de que ya lo había leído.En ese momento fue cuando vi una cláusula que no aparecía en el contrato recibido por ServiCheck : prohibida la tenencia de mascotas en la vivienda. En ese momento yo le conté al propietario que no estaba informada, y que yo tenía una perra de la que me tenía que hacer cargo. Incluso les enseñe fotos de mi mascota. Ellos se sorprendieron ya que me afirmaron todos los presentes que ese tema se lo habían dejado claro a la agencia.Ademas , reitero que el día 31 del mismo mes teníamos que entregar las llaves del piso en el que vivíamos entonces, de manera que no teníamos donde ir.El propietario me invito a firmar y valorar ese tema en los siguientes días, estando nosotros pendientes de su respuesta.Definitivamente los propietarios decidieron que no querían mascotas tal y como se había firmado.Llamamos a la agencia buscando una solución. El agente mediador, Nash, me recomendó que mintiera a los propietarios (tengo la grabación telefónica) diciendonos que en caso de que nos vieran o nos preguntarán, dijéramos que el perro estaba en la vivienda temporalmente y que los propietarios no se iban a enterar de la realidad. Obviamente nosotros hicimos caso omiso de esta recomendación .Me personifique junto con Rodrigo en la agencia para pedir que pusieran por escrito lo que me estaban diciendo por teléfono o sino que me dieran la hoja de reclamaciones. Les hicimos constar nuestra incomodidad en el edificio teniendo que ocultar al perro, intentando no coincidir con vecinos, y viviendo de una manera agobiante aún no sintiéndonos responsables de la situación. Ellos intentaron disuadirme diciéndome que ellos desconocían que los propietarios no querían mascotas. Incluso me dijeron que esa cláusula no era válida aún estando firmada, cosa que no tiene ningún sentido. Aún así yo insistí, porque no comprendo que al pedirle el contrato de arrendamiento a firmar me envíe uno que no corresponde con el que nos presentaron el día de la firma. Pedí la hoja de reclamaciones hasta en tres ocasiones. Rodrigo vio como a escondidas hicieron un gesto a la secretaria para que no la imprimiera. Por eso recurro ante la OCU que esta agencia busca únicamente su beneficio económico a costa de todo, incluso con mentiras.Tampoco quiero problemas con el propietario, por lo que les exijo que se hagan cargo de los costes económicos de dejar la vivienda lo antes posible.De esta manera, reclamó MÍNIMO los 790€ que entregamos a la agencia en concepto de honorarios de la agencia inmobiliaria, ya que con engaños han creado la situación actual en la que podemos ser expulsados de la vivienda en cualquier momento por incumplimiento de contrato.Ademas reclamamos a mayores los 2765€ para dejar el piso o que medien con el propietario para irnos a 31 de julio devolviéndonos nuestra fianza (790€).Todo esto por su mala gestión y su negativa a dejarnos reclamar formalmente.