Hola, en julio de 2022 se terminó mi contrato con Iberdrola, el cual renovaron con precios que llegan al triple de los que estaba pagando. Recibo las facturas por email y en ninguna me advirtieron del cambio de precios, quitándome la posibilidad de optar por un plan o empresa mejor. Hice el reclamo en forma telefónica y en la empresa me dijeron que fui notificado por correo postal, pero lo cierto es que no he recibido ninguna carta. También me dijeron que en el momento de notificarme de los precios nuevos (a través de la carta no recibida), tenían planes con precios especiales, pero que ahora no podían ofrecerme nada mejor. Las consecuencias es que ya pagué 5.600€ por 47 días de consumo, el triple de lo que estaba pagando y no es asumible para mi empresa.