OCU exige una auditoría del caso Volkswagen

Suma y sigue: Volkswagen confiesa más pecados y la bola no para de crecer. A los 11 millones de coches con motores trucados para mentir en las emisiones de NOx, se suman ahora otros 800.000 con irregularidades en sus emisiones de CO2. El Ministerio de Industria debe investigar.
El escándalo no para de crecer
Primero vino el shock: el fabricante alemán, presunto ejemplo de eficiencia, había mentido durante años.
Después los datos: 11 millones de motores trucados que emitían entre 6 y 9 veces más NOx de lo permitido.
Luego el bochorno: la Unión Europea cediendo ante la industria automovilística con un acuerdo sobre emisiones contaminantes que perjudica a todos los consumidores.
Ahora más madera (o más humo, para ser precisos): el problema no es solo el NOx. Volkswagen ha admitido "irregularidades" en las emisiones de CO2 de 800.000 vehículos.
Y en el futuro inmediato vienen curvas: la Agencia de Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos cree que hay gato encerrado también en los motores más potentes.
El ministro debe reaccionar
Estamos hablando de un fraude, tanto a los distintos estados europeos (hay impuestos y ayudas de por medio, como el PIVE, que se conceden en función de las emisiones CO2) como a los consumidores (compras algo que no es lo prometido).
- OCU pide al Ministerio de Industria una investigación oficial y urgente sobre el alcance de este gigantesco engaño.
Estamos estudiando todas las vías posibles de defensa para los afectados por este fraude.
No descartamos las acciones judiciales para conseguir la reparación del daño sufrido por los consumidores, la indemnización por los perjuicios y la sanción a los responsables.
Unámonos contra las mentiras de Volkswagen
Primero vino el shock: el fabricante alemán, presunto ejemplo de eficiencia, había mentido durante años.
Después los datos: 11 millones de motores trucados que emitían entre 6 y 9 veces más NOx de lo permitido.
Luego el bochorno: la Unión Europea cediendo ante la industria automovilística con un acuerdo sobre emisiones contaminantes que perjudica a todos los consumidores.
Ahora más madera (o más humo, para ser precisos): el problema no es solo el NOx. Volkswagen ha admitido "irregularidades" en las emisiones de CO2 de 800.000 vehículos.
Y en el futuro inmediato vienen curvas: la Agencia de Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos cree que hay gato encerrado también en los motores más potentes.
El ministro debe reaccionar
Estamos hablando de un fraude, tanto a los distintos estados europeos (hay impuestos y ayudas de por medio, como el PIVE, que se conceden en función de las emisiones CO2) como a los consumidores (compras algo que no es lo prometido).
- OCU pide al Ministerio de Industria una investigación oficial y urgente sobre el alcance de este gigantesco engaño.
Estamos estudiando todas las vías posibles de defensa para los afectados por este fraude.
No descartamos las acciones judiciales para conseguir la reparación del daño sufrido por los consumidores, la indemnización por los perjuicios y la sanción a los responsables.
Unámonos contra las mentiras de Volkswagen