El pasado 4 de julio de 2025 alquilé un vehículo de Europcar Mobility Group Germany (EMobG Services Germany GmbH) en su oficina de Múnich North, con devolución el 9 de julio en el aeropuerto de Múnich. El vehículo era un Kia Ceed SW, matrícula HH-WP8238, y el número de contrato fue 1099158913.
Desde el primer momento, la experiencia fue deficiente y poco transparente. Toda la documentación que se me entregó estaba redactada exclusivamente en alemán, idioma que no hablo ni comprendo, y no se me ofreció una versión en inglés ni en español. El agente que me atendió tampoco se esforzó por explicarlo adecuadamente: su nivel de inglés era limitado y no facilitó una comprensión mínima de lo que estaba firmando. Me vi obligado a firmar un contrato que no entendía, sin ninguna asistencia ni garantía de que la información esencial (estado del vehículo, seguros, daños previos, condiciones, etc.) me estuviera siendo correctamente comunicada.
Además, no se realizó inspección alguna del vehículo en mi presencia en el momento de la entrega. No se revisó el coche conmigo, ni se me mostró el parte de daños existente, ni se me ofreció la posibilidad de verificar su estado. El proceso fue apresurado y poco profesional, hasta el punto de que el empleado incluso olvidó entregarme la silla infantil que había reservado porque estaba atendiendo a otro cliente, lo que tuve que reclamar personalmente.
Tras devolver el coche el 9 de julio, recibí días después una reclamación por email de 868,85 €, supuestamente por un rasguño de 2 a 5 cm en la llanta delantera derecha. Esta reclamación incluía una factura de reparación y un cargo adicional por gestión. Posteriormente, recibí una segunda carta en la que se me exigía el pago antes del 28 de agosto, amenazando con nuevas acciones.
En el parte de devolución consta expresamente que yo no estaba conforme con el daño. A pesar de ello, Europcar insiste en que el daño no existía antes y que debo asumirlo, sin aportar prueba alguna más allá de esa afirmación unilateral. Incluso afirman que "de haber estado presente al inicio, yo lo habría visto", lo cual invierte de forma inaceptable la carga de la prueba y coloca al consumidor en situación de indefensión.
Yo no causé daño alguno al vehículo durante el período de alquiler, y así lo manifesté al técnico en el momento de la devolución. Todo indica que dicho daño pudo haber estado presente previamente y que, por su propia falta de procedimientos claros de revisión y entrega, Europcar pretende ahora imputármelo.
Lo que solicito a la OCU
Que se archive la reclamación por daños realizada por Europcar, ya que no se ha demostrado que el daño fuera causado bajo mi responsabilidad, ni se me ofreció la oportunidad de revisar o comprender el contrato de forma adecuada.
Que Europcar revise sus prácticas y procedimientos de entrega de vehículos a consumidores internacionales, garantizando que:
los contratos se presenten en un idioma comprensible (inglés o español),
los clientes tengan la oportunidad de revisar el estado del vehículo junto con un agente,
y se firme un parte conjunto de verificación del estado.
Que se advierta a Europcar sobre la vulneración de derechos básicos del consumidor europeo, especialmente en materia de transparencia contractual y buena fe.
Que, en caso de persistencia en esta reclamación sin pruebas concluyentes, se valore la apertura de un expediente sancionador o acciones colectivas.
Adjunto toda la documentación relevante (contrato en alemán, correos enviados), a disposición para su análisis.