Un decálogo para cuidar tu salud mental
Prevención y autocuidado en un entorno VUCA
En estos dos últimos años hemos vivido unas circunstancias que han cambiado nuestra vida por completo. Si antes ya nos teníamos que desenvolver en un entorno cambiante, la nueva realidad nos ha obligado a convivir con altas dosis de incertidumbre. La pandemia ha tenido un importante efecto sobre nuestro bienestar, aumentando los problemas de salud mental. En OCU queremos que haya psicólogos clínicos en atención primaria, pero también te damos algunas claves para cuidar tú mismo tu salud y bienestar mental.

Estamos viviendo en un entorno VUCA: una realidad cotidiana volátil, incierta, cambiante y ambigua.
La covid 19 no solo afecta a nuestra salud, sino también a nuestro estilo de vida, y nuestras rutinas personales, familiares o laborales. La falta de información, los constantes cambios normativos, las restricciones, no han hecho sino aumentar esta incertidumbre y descontrol. Ante esta situación, no es extraño encontrarse con altos niveles de estrés, ansiedad, depresión o insomnio: es momento de cuidarse.
Esta información está reservada a Amigos de OCU y socios
Para seguir leyendo, por favor, identifícate como Amigo o socio
¿Todavía no estás registrado? Registrarse
Contenido reservado a socios y Amigos de OCU.
Para acceder a este contenido por favor identifícate o regístrate como Amigo .Cuando el cambio a nuestro alrededor es la única constante, fomentar nuestro autocuidado es la mejor repuesta para adaptarnos mejor a esos cambios y ajustar nuestras expectativas. Toma nota de este decálogo que te ayudará a afrontar la incertidumbre y el descontrol, el aislamiento y la fatiga pandémica.
1. Ajusta tus expectativas
Aunque es desagradable, y a todos nos gustaría terminar con esta situación cuanto antes, no está en nuestras manos.
2. Focaliza
Céntrate en lo que sí depende de ti y puedes cambiar, adaptar o mejorar.
3. Practica una anticipación flexible
Aunque nuestro entorno apenas es predecible ya, anticiparse a los posibles obstáculos o cambios que puedan surgir mediante plantes o alternativas, te aportará mayor sensación de control.
4. Usa técnicas de relajación
En tiempos de estrés y ansiedad, aprender alguna técnica de relajación como respiración diafragmática o mindfulness, por ejemplo, es un buen antídoto para afrontarlo y gestionarlo. También conocerse y saber cómo autogestionarse: haciendo ejercicio frecuente, saliendo, descansando lo suficiente…
5. No dejes de lado todas las actividades sociales
De ocio, ejercicio, etc. que se pueden seguir haciendo, bien como antes, o adaptándolas (verse en terrazas, de paseo con un café en la mano, en la montaña o en el campo…).
6. Haz lo que te gusta
Respeta las medidas de seguridad e higiene, pero mantén aquello que te aporta bienestar (espectáculos, hobbys, clases, actividades…) , aunque sea adptándose a las circunstancias.
7. Prueba nuevas actividades
Actividades de ocio y tiempo libre, aprovecha para iniciar intereses o proyectos que tenías aparcados durante tiempo. Por ejemplo, un nuevo deporte, manualidades, costura, cocina, jardinería, etc. da rienda suelta a tu creatividad y curiosidad.
8. Mímate
Cuídate física y psicológicamente. Descansa y come sano y equilibrado; date caprichos o regalos; dentro de lo que puedas hacer, haz lo que más te guste o te apetezca…
9. Permítete sentirte mal
Si no tienes un buen día, si no te sientes bien, si estás con el ánimo bajo, frustrado o irritado, date permiso para sentirlo, para tener un día gris. Es normal y esperable. Te hace humano.
10. Ve paso a paso
Procura centrar la mirada en el corto plazo y en el día a día.