Ahorrar impuestos con retribuciones en especie

¿Quieres pagar menos impuestos? Es el momento de pensar en ello, pues una buena planificación fiscal desde ahora puede suponer un significativo ahorro de impuestos. Hay algunas medidas para reducir la carga fiscal en las que ya puedes empezar a pensar: una de ellas, muy interesante es sustituir parte del salario por retribuciones en especie.
Una manera sencilla de disminuir los ingresos por los que tienes que tributar es solicitar a la empresa que sustituya parte del salario en dinero por retribuciones en especie.
Algunas de estas retribuciones en especie están exentas de tributación. Por ello, si puedes elegir, opta entre las que están exentas, para conseguir un importante ahorro fiscal. Son las siguientes:
- Vales de comedor o tarjetas de pago para utilizar en establecimientos de hostelería los días hábiles del trabajador, incluso cuando desempeñe su trabajo total o parcialmente a través del teletrabajo o mediante jornadas continuas. El importe máximo exento es de 11 euros al día (el exceso sí tributa). Los vales o tarjetas deben ser intransmisibles, estar numerados, expedidos de forma nominativa y en ellos debe figurar la empresa emisora. Siempre que no se sobrepase el máximo exento, la exención incluye los gastos por llevar la comida al domicilio, con independencia de que los facture el establecimiento de hostelería junto con la comida o la empresa encargada del transporte, .
- Cheque o tarjeta para abono transporte. Están exentos los 136,36 euros satisfechos al mes por la empresa para desplazamientos del empleado entre su lugar de residencia y el centro de trabajo en transporte colectivo, hasta un máximo de 1.500 euros al año.
- La prestación de servicio de guardería a los hijos de los trabajadores o la contratación de este servicio con terceros debidamente autorizados.
- Cursos de formación.
- Primas de seguros médicos que cubran la enfermedad del trabajador, su cónyuge o descendientes, hasta un máximo de 500 euros anuales por cada uno de ellos (1.500 en caso de discapacitados).
- Primas de seguro de accidente laboral o de responsabilidad civil del trabajador siempre que el seguro cubra sólo el riesgo de accidente laboral o de responsabilidad civil del empleado en el ejercicio de sus ocupaciones laborales.
- Acciones de la empresa hasta 12.000 euros anuales.
La solicitud de estas retribuciones rebaja el importe salarial a declarar y también la base imponible del contribuyente. Además de pagar menos impuestos, esta opción puede resultar muy interesante a aquellos que no pueden aplicar ciertas deducciones (como la deducción por alquiler, ciertas deducciones autonómicas…), porque su base imponible supera los límites fijados para ello.
Si quieres saber todas las posibilidades de ahorrar en la próxima declaración de IRPF puedes consultar otros consejos para pagar menos.
Una manera sencilla de disminuir los ingresos por los que tienes que tributar es solicitar a la empresa que sustituya parte del salario en dinero por retribuciones en especie.
Algunas de estas retribuciones en especie están exentas de tributación. Por ello, si puedes elegir, opta entre las que están exentas, para conseguir un importante ahorro fiscal. Son las siguientes:
- Vales de comedor o tarjetas de pago para utilizar en establecimientos de hostelería los días hábiles del trabajador, incluso cuando desempeñe su trabajo total o parcialmente a través del teletrabajo o mediante jornadas continuas. El importe máximo exento es de 11 euros al día (el exceso sí tributa). Los vales o tarjetas deben ser intransmisibles, estar numerados, expedidos de forma nominativa y en ellos debe figurar la empresa emisora. Siempre que no se sobrepase el máximo exento, la exención incluye los gastos por llevar la comida al domicilio, con independencia de que los facture el establecimiento de hostelería junto con la comida o la empresa encargada del transporte, .
- Cheque o tarjeta para abono transporte. Están exentos los 136,36 euros satisfechos al mes por la empresa para desplazamientos del empleado entre su lugar de residencia y el centro de trabajo en transporte colectivo, hasta un máximo de 1.500 euros al año.
- La prestación de servicio de guardería a los hijos de los trabajadores o la contratación de este servicio con terceros debidamente autorizados.
- Cursos de formación.
- Primas de seguros médicos que cubran la enfermedad del trabajador, su cónyuge o descendientes, hasta un máximo de 500 euros anuales por cada uno de ellos (1.500 en caso de discapacitados).
- Primas de seguro de accidente laboral o de responsabilidad civil del trabajador siempre que el seguro cubra sólo el riesgo de accidente laboral o de responsabilidad civil del empleado en el ejercicio de sus ocupaciones laborales.
- Acciones de la empresa hasta 12.000 euros anuales.
La solicitud de estas retribuciones rebaja el importe salarial a declarar y también la base imponible del contribuyente. Además de pagar menos impuestos, esta opción puede resultar muy interesante a aquellos que no pueden aplicar ciertas deducciones (como la deducción por alquiler, ciertas deducciones autonómicas…), porque su base imponible supera los límites fijados para ello.
Si quieres saber todas las posibilidades de ahorrar en la próxima declaración de IRPF puedes consultar otros consejos para pagar menos.