Me pongo en contacto con ustedes porque realicé un pedido el día 18 de Abril, el pedido se realizó en 3 veces ya que el límite de tarjeta no me permitía pagarlo todo a la vez. La fecha de entrega era el 30 de abril, ese día no llegó nada, incurriendo en un incumplimiento de contrato por vuestra parte. Reclamé el día 2 de mayo, ya que el 1 fue festivo, me dijeron que abrían una incidencia en el caso y que llegaría ese mismo día, tampoco ocurrió, al llamar a atención al cliente por la tarde me dijeron que lo entregarían el lunes siguiente ya que ese día era viernes y no había llegado. El lunes tampoco llegó ni nadie me comunicó nada. Todo esto me conllevó el gasto de dos días de albañiles ya que se suponía que iba a llegar el suelo y no sucedió. Seguí llamando días siguientes a atención al cliente, nadie sabía nada, lo único que me repetían es que me abrirían una incidencia y que me llamarían desde el departamento de incidencias, nadie me llamó nunca. El día 5 de mayo decidí ir a una tienda física ante la desesperación, un chico de allí intentó arreglarlo y a los dos días recibí una parte del pedido. Seguimos llamando, ya que el resto del pedido no había llegado y llevaba más de una semana de retraso, de nuevo nos dieron largas, decidimos volver a ir a una tienda física, y a los pocos días llegó otra parte del pedido. A día de hoy me sigue faltando una parte del pedido, lleva más de un mes de retraso, nadie me da respuesta ni solución, desde la tienda física intentan solucionarlo pero tampoco lo consiguen. Es una tomadura de pelo . Voy a la tienda y me dicen que lo solucionarán y me llamarán , ni solucionan ni me llaman, estamos casi en junio y mi pedido de finales de abril no aparece ni me contestáis .
SOLICITO una compensación por parte de Leroy Merlin, ya que me ha costado el dinero los albañiles los días que el suelo no ha llegado a tiempo, más el carburante de ir desde Carmona, donde resido, a la tienda más cercana, en Alcalá de guadaira, en múltiples ocasiones. Además de la frustración y la incertidumbre de no saber aún cuando llegará la parte del pedido que falta, o siquiera saber dónde está. Sin otro particular, atentamente.
