Hola, SEUR se niega, de nuevo, y tras ponerse en contacto conmigo después de la primera reclamación que realicé a través de esta plataforma, al reparto de un paquete de mi propiedad, que desde el pasado 25 de marzo tiene en su haber y cuyo coste de transporte ha sido debidamente pagado. En su primera negativa, me exigió, en plena situación de confinamiento, la designación de un punto de entrega distinto a mi domicilio, por considerar que éste se encuentra en un barrio conflictivo, algo que el resto de empresas de paquetería no hace. Su segunda negativa fue inmediata, tras la comunicación de un domicilio alternativo en un barrio diferente de la ciudad por las mismas razones que le llevaron a la primera. Por último, ha decidido resolver de manera unilateral y sin comunicación alguna la devolución del paquete a la empresa que lo despachó. El producto que SEUR no ha entregado consiste en una tableta digitalizadora que necesito para poder impartir clases online, y cuyo desempeño se ha visto notablemente mermado por esta circunstancia. Entiendo que una empresa tenga su política, pero no a costa de mi derecho a trabajar, cuyo ejercicio está sujeto a estas circunstancias tan anómalas, a las que las políticas de empresa también deberían quedar supeditadas.
