1. El 1 de septiembre de 2022 contraté un servicio con Orange España S.A.U., que incluía la entrega de un televisor.
Sin embargo, el televisor nunca fue entregado ni recibido por mí.
2. La empresa de mensajería SEUR, encargada del envío, informó a Orange de que la entrega constaba sin firma y sin comprobante de DNI, por lo que no se acreditó la recepción del producto.
Posteriormente, se me remitió un supuesto documento de entrega en el que figura una firma con mi nombre “Joan”, pero no corresponde a mi rúbrica, y además aparece un NIF que no es el mío, por lo que se trata de una falsificación documental.
3. Dentro del plazo legal de 15 días naturales desde la contratación, ejercí mi derecho de desistimiento y cancelé el servicio con Orange.
Por tanto, no procede el cobro de ninguna penalización por permanencia, ni mucho menos por un bien no entregado.
4. Pese a ello, he recibido reclamaciones de pago por parte de empresas de recobro como PROCobro / Bulnes Capital S.L., alegando una deuda inexistente.
Ya he remitido varios correos electrónicos negando expresamente la deuda, adjuntando pruebas del desistimiento y del parte de entrega sin firma.
Incluso, en una comunicación escrita, la propia empresa de recobro reconoce que no dispone del comprobante de entrega (“La expedición consta entregada en nuestro sistema informático sin localizar el correspondiente comprobante de entrega”).
5. A pesar de haber aportado toda la documentación y de que los hechos son claros, estas empresas continúan reclamando el pago, lo cual considero un trato abusivo, un intento de cobro indebido y una vulneración de mis derechos como consumidor.
