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Prisa por mudarse de casa
hace 3 años - martes, 26 de mayo de 2020
Necesito mudarme de casa
¿Prisa por mudarse de casa?
Consideraciones económicas aparte, el reciente periodo de enclaustramiento forzado en nuestras viviendas ha supuesto para muchos el motivo para alcanzar una firme resolución de que necesita un cambio de casa. Por carencia de mayor espacio, luz, terrazas, zonas verdes cercanas, un despacho para el trabajo, una mayor separación con la zona de juegos para los niños, mejor aislamiento de los ruidos vecinales o de la calle, etc.
O quizá el motivo del cambio sea precisamente económico. La crisis ha supuesto una reducción de ingresos y la economía familiar requiere de un alivio en este gasto fijo y descomunal que suele ser la vivienda.
Sea por la razón que sea, ahora que ya pueden visitarse pisos en nuestra provincia podemos estar tentados de correr a buscarlos.
Nuestro consejo es que no se precipite. Comprar casa ahora: precauciones.
Margen de bajada de la vivienda en barrios de Madrid.
Falsa impresión de euforia inmobiliaria
Tras más de dos meses de parón es lógico que haya un cierto “atasco” en las mudanzas. Hay operaciones pendientes, contratos que liquidar, nuevas situaciones profesionales, más toda la nueva demanda generada en este tiempo. Se habla de un boom del alquiler ante las dificultades de muchos para abordar una compra de vivienda, por las peores condiciones laborales, la prudencia de las entidades financieras o los cambios de criterio de las tasaciones.
Todo ello es cierto, pero debe tener en cuenta que al igual que la situación de confinamiento no era la normal, tampoco lo es la fase inmediatamente posterior al estado de alarma. La ausencia de operaciones (compras y alquileres) ha trastocado las estadísticas y por ello hay que mirar todas las cifras con escepticismo.
Mantenga la cabeza fría y los ojos puestos en su objetivo, ya sea este vender, comprar o alquilar. No debe tomar decisiones en función de cuatro titulares de la prensa, sino con base en las previsiones a futuro que usted se haga después de haber leído, contrastado informaciones y hecha su propia composición de lugar.
Y con base en nuestras previsiones nosotros exponemos nuestros consejos.
La crisis baja el valor razonable de las viviendas.
Si quiere vender es buen momento
Si posee inmuebles que no usa, este puede ser un buen momento para venderlos. Prevemos que los precios caigan en los próximos trimestres, a consecuencia de la menor capacidad de pago de los hogares epañoles debida a las previsiones de empleo y salarios. Es también una de las conclusiones expuestas al término del reciente documento del Banco de España sobre el mercado de la vivienda en España entre 2014 y 2019.
Si no lo quiere vender, plantéese su puesta en alquiler. No busque obtener la renta más elevada, sino el inquilino con perspectivas más estables. Aunque la estabilidad es ahora un anhelo complicado. Hay que ser conscientes de que los inquilinos de vivienda pueden desistir de su contrato una vez que hayan pasado seis meses. Esto no ocurrirá si el inmueble está en buenas condiciones, la renta es razonable y -crucemos los dedos- la situación económica del inquilino no empeora.
Alquiler: dos consejos que le salvarán.
Cómo calcular la rentabilidad de un inmueble.
Si está buscando casa, no se precipite
Si busca comprar una vivienda ahora debería tomarse las cosas con calma. De media, los precios siguen estando muy por encima de su valor razonable obtenido a través de la actualización de rentas de alquiler. Nosotros prevemos que la crisis generada por el Covid-19 sirva de acelerante de la recuperación de la normalidad en los precios de los inmuebles, por lo que consideramos una bajada de precios en los próximos trimestres. No debería comprar ahora salvo que encuentre una auténtica oportunidad. Lo previsible es que haya más oportunidades a finales de este año y en 2021.
Si necesita imperativamente una vivienda ahora la mejor opción sería un alquiler. Negocie en precio a la baja haciendo valer su estabilidad y seguridad para el arrendador. Siempre podrá mudarse pasados seis meses, algo que no es lo ideal pero que debe servirle para tratar de negociar la renta ahora. Todos ganan con la estabilidad. Los arrendadores prudentes son conscientes de ello. Si el suyo no es de este tipo, más vale pensar en una futura mudanza, de modo que no haga mucho gasto en una vivienda en la que no prevea quedarse mucho tiempo.