Viviendas para mayores, el cohousing

Atender necesidades de los mayores

La población mayor aumenta en número y sus necesidades varían. En términos generales los seniors tienen hoy mayor movilidad y mayor poder adquisitivo que hace unas décadas. Requieren soluciones adaptadas que faciliten la vida y les mantengan activos.

Según el INE en 2021 el 19,5% de la población española tenía 65 o más años. Los que tienen 80 o más años sumaban ya el 6% de la población total. Más de 1,5 millones de españoles tienen 85 o más años. Y las proyecciones del INE estiman que en 2035 la población española de 65 o más años supere el 26% de la población, unos 12,7 millones de personas. Estas tendencias requieren de nuevas soluciones. Tras la jubilación muchas personas se encuentran en viviendas no adaptadas o prefieren trasladarse a otras latitudes de clima más benigno. En España un 75% de los edificios residenciales no son accesibles. Hasta un 40% de los edificios de 4 o más plantas no disponen de ascensor.

Para preparar bien esos años, los mayores pueden optar por vender ellos mismos su vivienda y adquirir otra más adecuada y accesible allí donde deseen, o inclinarse por opciones que comentamos.

La venta de vivienda por mayores de 65 años.

Alternativas a las residencias

Las tradicionales residencias de mayores presentan ventajas e inconvenientes, como quedó de manifiesto durante los meses más duros de la pandemia. La falta de flexibilidad en las entradas y salidas, las dificultades de los parientes para visitas, la soledad y una vida pasiva, así como la sensación de falta de transparencia en las condiciones de atención sanitaria son elementos que generan cierto rechazo.

Como iniciativa privada está cobrando fuerza el llamado “cohousing”, desarrollado en otros países con el siguiente espíritu: una serie de personas, no necesariamente de edad madura deciden ponerse de acuerdo para vivir en una especie de casa común, donde cada uno tiene su zona privativa y comparten servicios como el comedor, la lavandería y otros. Idealmente para grupos no muy numerosos -de unos 20 o 30 pequeños apartamentos- el fin es mantener una vida activa y de convivencia compartiendo una serie de actividades desde la autogestión a modo de cooperativa. No es una comuna.

Opciones para pagar la residencia de los mayores.

Un cohousing para mayores

El cohousing es un modelo de alojamiento colaborativo estable más adaptado a necesidades de personas de mayor edad en situación de valerse por sí mismos, aunque no solo para ellos. Cada residente tiene su propio apartamento, de dimensiones reducidas (unos 50 m²) porque se prima el uso en común de comedores y otros espacios compartidos en edificios accesibles pensados para facilitar la movilidad, adaptándose a las necesidades y a los intereses de todo el grupo. Al compartir los servicios con el resto de los residentes se reducen los costes, se estimula la actividad, se mejora la asistencia completa que se recibe y se ve favorecida la convivencia. El paquete de servicios puede ser variado: consulta médica, fisioterapia, peluquería, piscina, salas de juegos, bibliotecas, jardines, huerto, invernadero… además de cocina y lavandería.

No hay afán de lucro y los espacios se conciben sin barreras arquitectónicas. La propiedad es de la cooperativa y cada partícipe goza de un derecho de uso que es transmisible y heredable, normalmente vía la propia cooperativa, para asegurarse de que se cumplen los requisitos que ellos mismos hayan establecido para vivir allí.

Cifra destacada:

En 2021 la esperanza de vida en España fue de 83,1 años, superando la de las mujeres los 85,8 años. En 2001 la esperanza de vida era de 79,7 años.

Otra opción distinta es la posibilidad de alquilar una vivienda junto con otros mayores, vea el coste.

Integrar una cooperativa desde el inicio

La manera “natural” de participar en un cohousing es integrar una cooperativa, si es posible desde su inicio para implicarse en la concepción y desarrollo del proyecto. Algunas administraciones -aún pocas- facilitan terrenos con cesiones a largo plazo, lo que supone un importante ahorro de costes. El Plan Estatal para el Acceso a la Vivienda 2022-2025 tiene entre sus objetivos la promoción de esta modalidad residencial, algo que tendrán que implementar las comunidades autónomas. Por ejemplo, en un proyecto de cohousing en Valladolid -Tejiendo Vida- que ha beneficiado de una cesión de suelo, cada partícipe deberá pagar una suma inicial de unos 40.000 euros por el derecho de uso, y los gastos mensuales rondarían los 900 euros, incluyendo la comida del día, servicios y suministros, la amortización del préstamo para la construcción y hasta un fondo común para situaciones de dependencia.

Qué hemos encontrado como cohousing

Aunque ya existen algunos ejemplos consolidados, el cohousing está por desarrollar en España. Se encuentran a veces productos asimilados, pero que quizá no guardan el mismo espíritu. Existen empresas que asesoran y acompañan en todo el proceso, con estudio de viabilidad, reuniones iniciales de información, constitución de la cooperativa, búsqueda de financiación, adquisición del suelo y construcción, obtención de permisos, la propia gestión del complejo una vez en funcionamiento, etc. Son empresas que pueden tener ya suelos disponibles y funcionan como una gestora de cooperativas de vivienda y con proyectos llave en mano, como este que sigue.

En uno de los proyectos estudiados, en fase de concepción, la aportación prevista a la cooperativa es de entre 200.000€ y 250.000€, y lo que se adquiere es un derecho de uso que es transmitible. Si al final no se realiza la transmisión se devuelven las cantidades aportadas, porque la cooperativa lo transmitirá a un nuevo solicitante, contando con que exista una lista de espera. La cooperativa encarga los distintos servicios a empresas externas: limpieza, lavandería, portería, etc. Se estiman unos gastos mensuales de entre 300 – 350 €/mes (sin alimentación) en función de esos servicios de que se disfrute. Existen ubicaciones en el entorno de Madrid y en la costa de la Comunidad valenciana.

Algunas ideas de precios

Hemos analizado algunas de las propuestas existentes con apartamentos de uno o dos dormitorios para personas mayores de 65 años con movilidad. Normalmente hay que dar una aportación inicial que varía bastante y una cuota mensual por los servicios que se disfruten. Uno de los presupuestos obtenidos ofrece un apartamento de 60 m² al que se puede acceder de dos modos:

1. Compra del derecho de uso: el precio de la participación obligatoria es de unos 125.500 €. La cuota de servicios parte de 460 € al mes y aumenta en 190 € si hay otro acompañante.
2. Alquiler: el precio parte de 825 € al mes, incluida la cuota de servicios. Si tiene acompañante que también puede valerse por sí solo, el precio es de 320 € más.

Se valora el grado de independencia de los residentes y la cuota de servicios mensual es más cara en función de la dependencia.

Cesión por 30 años

Otra de las empresas consultadas tiene una ubicación en la provincia de Alicante con variedad de apartamentos por tamaño. Se hace una aportación única por el uso y disfrute de un apartamento durante 30 años, con sus instalaciones y servicios. Para apartamentos de 1 dormitorio, unos 60 m², la aportación es de entre 93.000 € y 99.000€, dependiendo de la ubicación. A ello se añade una renta mensual de 350 €. En apartamentos de 2 dormitorios, de entre 82 m² hasta 109 m², la aportación única va de 119.500 € a 178.000 €, dependiendo de la superficie, a lo que hay que añadir una suma mensual de unos 425 € por apartamento, independientemente del número de personas que lo habiten.

Aquí si se fallece antes de los 30 años la cesión de uso se extiende a los convivientes, pero si no los hay el contrato se extingue y los herederos directos solo tienen acceso a las pertenecías propiedad del inquilino.  Si se decide abandonar el centro durante los primeros 4 años le devuelven una parte de la cuota única. Mejor estudiarlo bien y no arrepentirse. Si transcurren los 30 años pactados el contrato se renovaría anualmente y solo pagaría la renta mensual que venía ya pagando. Las probabilidades de que ocurra son escasas, solo el 0,28% de la población tiene 95 o más años en España.

Coste comparado del cohousing

En la tabla comparamos los costes de esas fórmulas con los de un apartamento similar en la misma localidad que usted compre o alquile por su cuenta, aunque lógicamente no dispondrá de los servicios comentados. Si lo compra podrá dejarlo a sus herederos. Si lo alquila gastará mucho menos pero no tendrá asegurada la duración del alquiler más allá de cinco años. Como referencia, para una persona de 70 años el valor del usufructo vitalicio del apartamento de 60 m² sería de 30.020 euros.