Hay muy buenas opciones a su alcance, como el WisdomTree Artificial Intell (IE00BDVPNG13), un ETF que encontrará en banco BiG y que sube un 22% desde que lo recomendamos en septiembre pasado. O un fondo tradicional barato, a la venta en EBN Banco, como el Allianz Global Artificial Intelligence RT-EUR (LU1597246039; +21%), el Echiquier Artificial Intell. K (LU1819479939; +29%) o el DWS Invest Artificial Intelligence TFC (LU1863263858; +24%).
Un nuevo mundo…
En los últimos meses, la inteligencia artificial (IA) ha irrumpido sacudiendo sectores y en algunos casos redefiniendo las reglas del juego para el futuro. Si bien la IA tiene ya una larga trayectoria, el gran salto adelante se dio con la aparición de los modelos de lenguaje grandes (LLM), como Google BERT o chat GPT que, aprendiendo las relaciones entre las palabras y las frases, son capaces de realizar traducciones, resumir textos, generarlos o incluso responder preguntas, aunque ciertamente no sepan muy bien de lo que están hablando. Después ha continuado hacia sistemas machine learning en los que es la propia IA la que busca información, la procesa y aprende, dando sentido a lo que dice; y a la inteligencia artificial generativa (DALL-E 2, MuseNet, Jukebox, GitHub Copilot…) que no solo trabaja con textos, sino que es capaz de generar música, imágenes o código. Toda una revolución tecnológica en la que a las máquinas ya no es necesario hablarles en su lenguaje como hasta ahora, sino que son ellas las que entienden el nuestro.
Que estalla en inversiones
La IA es como un bebé que está aprendiendo. Y si bien ha dado un salto de gigante en los últimos meses, especialmente desde que Chat GPT, la primera IA democratizada, saltó al mercado, es porque las grandes tecnológicas, y en general cualquiera con olfato inversor, han destinado ingentes recursos a su desarrollo. El mercado calcula que en 2023 se invirtieron más de 260.000 millones de dólares en startups de IA, un 20% más que el año anterior. Y este año, las inversiones siguen desenfrenadas: cerca de 115.000 millones han sido ya invertidos sólo por las 5 grandes (Google, Microsoft, Amazon, Meta y Apple). Algunas de ellas ya aplican la IA en utilidades prácticas para su negocio como hace Amazon con su asistente virtual para compras online; otras en cambio simplemente compran capacidades de cara al futuro.
· El desarrollo de estos modelos de IA se basa en procesar y generar grandes cantidades de información, un proceso de aprendizaje continuo que requiere una capacidad de cálculo y de almacenaje no vistas hasta el momento. De ahí que los primeros grandes triunfadores de esta revolución están siendo, en este primer estadio de desarrollo de la IA, las empresas que proporcionan estos equipos y servicios.
La industria hoy
La norteamericana Nvidia, que se ha revalorizado un 243% en los últimos doce meses, se ha convertido en la empresa imprescindible para proporcionar los equipos de cálculo que hacen posible la IA. Los equipos de Nvidia no destacan especialmente por tener unos microprocesadores con mejor rendimiento y eficiencia energética - que los tiene -, sino por que los ha enfocado al desarrollo de la IA estableciendo un ecosistema con sus usuarios. Quien quiera entrenar hoy una IA, tener una baja latencia para operaciones de IA en tiempo real p.ej. para conducción autónoma o reconocimiento facial, o explotar una HPC (computación de alto rendimiento), o compra un equipo de Nvidia o queda ya obsoleto antes de arrancar. La revalorización de la acción da vértigo, pero la mejora de sus márgenes y de la cifra de ventas no se quedan atrás. En nuestra opinión, la carrera por hacerse un hueco en la IA seguirá tirando al alza de la acción de Nvidia y merece la pena mantenerla.
· A su rebufo otras empresas tratan de cubrir esta demanda de equipos y microprocesadores, como ASML (+53%; puede comprar) que proporciona las maquinas con las que se producen los microprocesadores; o Intel (+53%; conservar) y Applied Materials (+80%; vender). En el campo del almacenaje son los sistemas en la nube quienes lideran los avances. De ahí que empresas con negocios pujantes en la nube como Amazon (+86%), es líder en este ámbito con una cuota de mercado que ronda el 33%, seguida por Microsoft (+55%), merecen nuestro consejo de compra. Y les siguen Alphabet (+50%) o IBM (+55%), que vale la pena conservar.
Lo que nos deparará el mañana
Los que más saben en este campo se aventuran a prever que la IA añadirá 13 billones de dólares a la economía mundial en 2030. Toda una revolución tecnológica que también podría destruir 20 millones de empleos en el mismo periodo. Una disrupción que plantea más interrogantes que respuestas. Saber cuáles serán las empresas triunfadoras en el siguiente estadio de la IA o si la regulación en ciernes frenará este crecimiento que hoy parece imparable sólo el tiempo lo dirá.
Quien teniendo una visión de largo plazo quiera subirse al carro de la IA hoy, puede ser más prudente que lo haga diversificando su apuesta a través de un fondo especializado. Hay muy buenas opciones a su alcance, como el WisdomTree Artificial Intell (IE00BDVPNG13), un ETF que encontrará en banco BiG y que sube un 22% desde que lo recomendamos en septiembre pasado. O un fondo tradicional barato, a la venta en EBN Banco, como el Allianz Global Artificial Intelligence RT-EUR (LU1597246039; +21%), el Echiquier Artificial Intell. K (LU1819479939; +29%) o el DWS Invest Artificial Intelligence TFC (LU1863263858; +24%).
Eso sí, todas ellas buenas opciones suponiendo que ya tenga el iShares Automation & Robotics (IE00BYZK4552; +23%), un ETF que apuesta por las tecnologías del futuro con una visión algo más amplia que la Inteligencia Artificial.
Cotización en el momento del análisis:
NVIDIA: 903,56 USD
WisdomTree Artificial Intell: 60,43 EUR
Allianz Global Artificial Intelligence RT-EUR: 286,70 EUR
DWS Invest Artificial Intelligence TFC: 217,26 EUR
iShares Automation & Robotics: 12,72 EUR