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Trampas de valor: cuando lo barato en bolsa puede salir caro

Trampas de valor: cuando las caídas en bolsa no son oportunidades de compra

Trampas de valor: cuando las caídas en bolsa no son oportunidades de compra

Publicado el  01 septiembre 2025
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Trampas de valor: cuando las caídas en bolsa no son oportunidades de compra

Trampas de valor: cuando las caídas en bolsa no son oportunidades de compra

Las acciones con precios bajos no siempre esconden oportunidades. Muy al contrario, con frecuencia son “trampas de valor”: compañías que parecen baratas por su PER o su dividendo, pero que en realidad sufren debilidades estructurales. En OCU Inversiones advertimos sobre estos riesgos y explicamos qué filtros aplicar para distinguir entre una acción con potencial de recuperación y otra que puede seguir hundiéndose.

Acciones baratas: oportunidad real o simple espejismo del mercado

En los últimos treinta años, varios estudios han demostrado que las acciones que han caído de precio no siempre son la ganga que parecen. Según un informe reciente de Research Affiliates, el grupo de compañías con múltiplos más bajos acumula con frecuencia un rendimiento negativo a largo plazo: en Estados Unidos, las llamadas value traps llegaron a restar hasta un 9% anual frente al mercado. Es lo que en la jerga bursátil se conoce como trampas de valor, la ilusión de que un precio bajo anticipa un rebote, cuando en realidad refleja debilidades estructurales de las empresas.

En OCU hemos visto esta película muchas veces: lo barato termina saliendo caro si no se miran con lupa varios factores. En este informe se señalan con el dedo varios indicadores que forman parte de nuestro análisis como el momentum, que usted puede ver en la cabecera del texto de cada acción en la edición semanal (descárguesela en la página de publicaciones), o la solvencia (balances fuertes). Concluyen que aplicar filtros como descartar las compañías “baratas” que además siguen cayendo en bolsa (momentum negativo) o presentan balances débiles, puede mejorar en torno a 5 puntos porcentuales al año la rentabilidad de una cartera de acciones “baratas”. Y es que no es lo mismo una acción barata que empieza a recuperarse, que una barata que sigue hundiéndose. En el primer caso puede haber una oportunidad; en el segundo, lo más probable es que se trate de una trampa de valor. En OCU Inversiones hablamos de ello porque queremos que el socio esté prevenido: no basta con mirar un PER atractivo o un dividendo generoso; lo importante es distinguir entre lo barato y lo problemático.

Con esa idea conviene observar al sector petrolero, que en 2025 ofrece una estampa ambivalente. Tras el repunte de la oferta y una demanda que crece con menos brío, el precio del crudo ha resbalado cuesta abajo un 13% en verano. Y los fondos que en él invierten se dejan entre -0,8% y -6,9% en el último año, aunque mantienen ganancias acumuladas de triple dígito en el último lustro. La reacción inmediata es pensar que las petroleras están “a tiro”: un PER en torno a 13 y una rentabilidad media por dividendo cercana al 5% parecen una invitación difícil de rechazar. Pero ¿no será este un ejemplo de trampa de valor?

La historia reciente muestra que los beneficios del sector son muy sensibles al precio del barril. Si los inventarios siguen subiendo y el crudo no recupera impulso, esas aparentes gangas podrían transformarse en retornos mediocres o incluso en pérdidas. Así pues, no confunda precio bajo con valor real. En OCU Inversiones ponemos luz allí donde el mercado lanza sombras. No afirmamos que el petróleo sea hoy una trampa de valor, pero sí que las dudas que pesan sobre el sector justifican andar con más cautela. Vea nuestro análisis y recomendaciones sobre el sector petrolero

 

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