- Sala de prensa
- El impacto de los tipos al alza
Noticias
Posiciones editoriales
El impacto de los tipos al alza
hace 9 meses - lunes, 12 de diciembre de 2022
Este año los bancos centrales lo han tenido difícil, pues se han visto en la disyuntiva de subir los tipos de interés para tratar de contener la galopante inflación aun a costa de frenar el crecimiento.
Subida de tipos al menos hasta marzo de 2023
En Europa la economía sigue sin dar señales tranquilizadoras y aunque serían necesarios nuevos estímulos por parte del Banco Central Europeo (BCE), el elevado coste de la vida no da tregua y no le permite ser acomodaticio. Al igual que en otras partes del mundo, por ahora los tipos seguirán subiendo, posiblemente hasta marzo de 2023. Y las compras de deuda seguirán en suspenso. Pero ¿y qué pasa con la deuda acumulada en la etapa anterior, donde los tipos no subían de cero y las inyecciones de liquidez eran constantes? Bien, pues al BCE no le quedará otra que aliviar sus arcas de esta deuda acumulada para impulsar el crecimiento y tratar de evitar que la liquidez circule en los mercados, contribuyendo a elevar los precios.
Para conseguir drenar liquidez del mercado el BCE tiene dos opciones. Una más agresiva sería vender la deuda que tenga en cartera sin esperar a su vencimiento. Y otra opción más comedida: no comprar más deuda nueva para reemplazar la que vaya venciendo paulatinamente. Salvo que pueda haber sorpresas de última hora, esta última será la opción elegida. Claro que ello no impedirá que esto tenga sus repercusiones en el mercado de deuda. La decisión de no comprar deuda pesará sobre los precios de los bonos del Estado, que como ocurre en cualquier mercado, se mueven en función de la ley de la oferta y la demanda. Lo bueno de ello es que precios más bajos equivale a mayores rendimientos en renta fija, por la relación inversa del precio de la deuda y los tipos. Rendimientos al alza que ya estamos viendo no solo en los bonos y obligaciones del Estado, sino también en los depósitos. Un despegue que sitúa a los de 12 meses por encima del 2,50% en algunas ofertas de entidades y que podrían seguir su camino ascendente, incluso después de que el alza de tipos oficiales concluya (vea la panorámica de productos de bajo riesgo a doce meses).
Y no solo los rendimientos de los depósitos están en aumento. También otros productos calificados de bajo riesgo como seguros de ahorro y cuentas de ahorro están subiendo sus intereses. Con ello mejoran las condiciones para aquellos ahorradores e inversores que tratan de sacar el máximo jugo posible a esa liquidez en barbecho a la espera de oportunidades o que simplemente es su colchón para imprevistos. Una buena noticia dentro del panorama de malos datos macro y de precios desbocados en la cesta de la compra. Aquellos que busquen un rendimiento seguro a vencimiento tienen este refugio ahora con algo más de rentabilidad para su dinero. Si usted es de aquellos que se atreve a componer una cartera de inversiones a largo plazo, deberá buscar el equilibrio entre distintas inversiones (vea las oportunidades en robótica), relegando a un segundo plano los productos de bajo riesgo con menores perspectivas de rendimiento.