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Opiniones para todos los gustos
hace 3 años - lunes, 9 de marzo de 2020
La epidemia del miedo y la incertidumbre sigue su curso a la par que el avance del coronavirus. Esta alteración que sobrevuela los mercados ha traído consigo una maraña de opiniones.
Unas que tratan de orientar a los inversores hacia posibles oportunidades o refugios seguros para su patrimonio. Entre estas voces las hay más tranquilizadoras y otras que producen más inquietud. Véase, por ejemplo, la previsión que ha hecho el conocido “Doctor Doom” de los mercados (“Doctor muerte”), Nouriel Roubini. Este ha vaticinado una caída de entre el 30% y 40% de los mercados y cree que es el momento de migrar hacia la renta fija. ¿Habrá que hacerle caso? Entre tanto, hay quien no pierde de vista el castigo sufrido por algunos valores en el parqué y comienza a frotarse las manos.
El “homo inversor” es miedoso por naturaleza, con lo que no sorprende que en una situación compleja como la actual crisis sanitaria – cuyos efectos también tratan de mitigar las autoridades monetarias; léase aquí la sorpresiva bajada de tipos llevada a cabo por la Fed la semana pasada –, se agarre a los consejos de estas voces, en muchos casos, sesgados por una visión cortoplacista de las inversiones. A nuestro parecer lanzarse apresuradamente al calor de la renta fija en estos momentos no es aconsejable, ya que podría conducirle a quedarse atrapado en productos con bajísimas rentabilidades durante mucho tiempo. No obstante, somos conscientes de la inquietud y la presión mediática que sufre el inversor, invadido por opiniones para todos los gustos, que acaban creándole aún más confusión. Y es que muchas veces no es fácil separar el grano de la paja. Por eso, en momentos como este, cobra mayor protagonismo el hecho de contar con información veraz e independiente, que sirva de guía en este temporal. Es el objetivo que desde OCU Inversiones perseguimos en nuestra labor diaria de análisis de mercados.
Pero no basta con tener buena información. Lo primero que debe plantearse este “homo inversor” es cuál es su perfil, para así decantarse por la estrategia más adecuada para él a largo plazo. Porque no todo el mundo tiene las mismas necesidades financieras, ni permanecen invariadas en el tiempo. De ahí, que pongamos a su alcance distintas estrategias de inversión. Desde las que optan por limitan el riesgo en mayor grado a las que admiten más altibajos con el objetivo de maximizar la rentabilidad. Diferentes estrategias para diferentes necesidades como la de quienes buscan la estabilidad, integrando los inmuebles en sus inversiones; así lo hacen las carteras que le propone nuestra revista hermana OCU Fincas y casas.
En cualquier caso, volviendo a las opiniones, nuestro consejo es que se aísle de todo este ruido y tenga en mente el largo plazo, que es el que pone a cada uno en su sitio. Así lo demuestra el 5,8% medio anual cosechado por nuestra Cartera Global Flexible en la última década.