Plan de paz sobre la mesa
Pese a un entorno marcado por tensiones internacionales persistentes y un aumento esperado de los presupuestos militares en Europa, las acciones del sector defensa han sido objeto de correcciones bursátiles en los últimos días. Esta recogida de beneficios por parte de los inversores se explica por el nuevo “plan de paz” para poner fin a la guerra entre Ucrania y Rusia. Esta reacción no nos sorprende, ya que el sector suele comportarse así ante los intentos de poner fin a este conflicto. Y estas tomas de beneficios son tanto más fuertes en cuanto que el sector es uno de los grandes ganadores en Europa en 2026: desde inicio de año gana un 75,4%. Compañías como Rheinmetall, Thales, Leonardo ganan un 141,6%, 63,6%, 72,4%. ¿Cómo afectaría al sector un acuerdo de paz en Ucrania?
Necesidad de rearme en Europa
En el caso de que llegara a firmarse un alto el fuego o un acuerdo de paz entre las diferentes partes, pensamos que no pondría en cuestión el escenario base. Los países europeos seguirán rearmándose, por un lado, para responder a la amenaza rusa (drones, ciberataques, guerra híbrida…), y por otro, para hacer frente al menor compromiso estadounidense en Europa. Ante este último y el deterioro de las relaciones transatlánticas, Europa es consciente de que debe asumir una parte creciente de su seguridad para seguir siendo disuasoria.
• Por tanto, la demanda de material militar seguirá siendo fuerte en los próximos años, lo que repercutirá positivamente en la cartera de pedidos y, posteriormente, en los beneficios de las compañías del sector. Si bien, los anuncios de pedidos pueden tardar en reflejarse en la cuenta de resultados de las empresas, con lo que no bas-tan para relanzar las cotizaciones bursátiles del sector; que, además, sigue estando muy politizado y, en consecuencia, sujeto a decisiones, a veces, volátiles. Un ejemplo son las dificultades franco-alemanas para desarrollar un nuevo avión de combate.
• Por su parte, la Comisión Europea está llevando a cabo iniciativas para animar a los países europeos a compartir más sus inversiones y aumentar la autonomía del Viejo Continente en defensa. Recientemente ha propuesto un "espacio Schengen militar" para facilitar la movilidad de los ejércitos y un mecanismo de financiación para la compra de equipos. Sin embargo, los Estados miembros quieren preservar su soberanía militar y se muestran cautelosos ante una integración excesiva o una planificación centralizada por parte de la Comisión.
¿Y al otro lado del charco?
La necesidad de los europeos de reforzar su defensa es una buena noticia para el sector estadounidense de defensa. Europa sigue dependiendo de los sistemas estadounidenses para varios segmentos críticos (aéreo, misiles, gestión de combate), donde su industria es deficiente. Los estadounidenses los producen en grandes cantidades, lo que permite a los europeos equiparse en plazos cortos.
• Los estadounidenses han comprendido que el crecimiento del mercado europeo será dinámico en los próximos años y se han apresurado a firmar contratos de producción en Europa. Es el caso de la americana Lockheed Martin, que multiplica sus contratos con la venta del lanzacohetes HIMARS para Estonia, los F-35 para Italia y Alemania, o sus asociaciones con Rheinmetall, Navantia o Leonardo. En los últimos trimestres ha perdido algo de fuelle en sus resultados debido a los retrasos y dudas en cuanto a sus aviones de combate, lo que ha hecho titubear la cotización, pero sigue siendo nuestra favorita en el sector del otro lado del charco.
Conclusión
El fortalecimiento de las capacidades militares en Europa es, a nuestro juicio, un movimiento de largo plazo provechoso para los grandes grupos europeos de de-fensa. Un sector que seguimos recomendando, preferentemente en Europa. La valoración actual refleja el crecimiento esperado de los beneficios y las evoluciones estructurales y no solo la influencia de la guerra en Ucrania. Por tanto, las actuales tomas de beneficios nos parecen exageradas. Si usted apostó por el sector cuando se lo recomendamos, la revalorización acumulada debiera decantarle por la prudencia. Mantenga, pero no compre más.
Nuestro consejo
Quienes aún no hayan apostado por el sector, su punto de mira podría posarse sobre
Thales,
Lockheed Martin, ambas incluidas en la cartera
Experto en acciones, o en
BAE Systems; las tres con consejo de compra.
• Para quienes quieran apostar por el sector de forma diversificada destacan los ETF:
WisdomTree Europe Defence (28,24 EUR; IE0002Y8CX98), nuestro favorito hasta ahora; y no de menor calidad, pero sí con menores costes, puede comprar el
SPDR S&P Europe Defense (9,16 EUR; IE0008GRJRO8; Xetra) y el
BNPPE Bloomberg Europe Defense (10,05 EUR; LU3047998896; Bolsa de París). Están disponibles en Banco BiG, sin,, comisiones de custodia para socios de OCU. En fondos tradicionales, tiene el
DNB European Defence A (108,71 EUR; NO0013528356), disponible desde 2.500 euros en EBN Banco.