Aun así, la eléctrica portuguesa tiene la estrategia adecuada y seguirá creciendo.
Acción barata.
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Centrado en las renovables y las redes eléctricas
En 2024 EDP obtuvo un beneficio de 0,19 euros por acción, por debajo de lo previsto (-16% que en 2023). Ello se debió a pérdidas no recurrentes por la salida de Colombia y del segmento eólico marino en EE. UU., una inversión a la que Trump ha mostrado su oposición. En términos recurrentes, el beneficio aumentó un 8%, con las actividades de producción y gestión de energía y redes eléctricas, compensando la menor contribución de EDP Renováveis. El beneficio total cayó un 4%, afectado también por las menores ganancias de las operaciones de rotación de activos. En el plano financiero, el resultado mejoró un 3% por la caída del coste medio de la deuda, especialmente en Brasil. La empresa aumentará ligeramente su dividendo a 0,20 euros por acción (rendimiento neto del 4,6%) y anunció un programa de recompra de 100 millones de euros de acciones. Ante la coyuntura menos favorable en renovables, la salida de Colombia y el aplazamiento de cuatro años de los proyectos eólicos marinos en EE. UU., el grupo rebajará de nuevo la inversión hasta 4.400 millones de euros en 2025 y 2026 (6.100 en 2023 y 5.400 en 2024), manteniendo su foco en renovables y redes eléctricas, cuyo peso en el negocio es cada vez mayor. Mantenemos nuestra previsión de beneficio por acción de 0,29 euros en 2025 y 0,31 en 2026. A pesar del ajuste del plan de negocio, EDP tiene la estrategia adecuada y seguirá creciendo, aunque a menor ritmo.
Cotización en el momento del análisis: 3,294 EUR
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