Persiste la inquietud
Bank of America va a rembolsar la ayuda pública con el fin de darse un balón de oxígeno. Pero su salud nos sigue inquietando. Acción cara. Venda.
Bank of America va a rembolsar la ayuda recibida del Estado (45.000 millones de dólares), mediante la venta de activos y una ampliación de capital (no acuda a ella). El banco pretende con ello alcanzar dos objetivos. Por un lado, liberarse del derecho de vigilancia del Estado, sobre todo respecto a su política de remuneración del personal y los directivos, y encontrar así más fácilmente un nuevo director, que se encargará entre otras cosas de formular una nueva estrategia para la entidad. Por otro lado, ahorrar 3.600 millones de dólares al año al recomprar las acciones preferentes en manos del Tesoro, que tiene que remunerar (coste al 2º trimestre: 25% del beneficio).
Pese a ello, seguimos inquietos respecto a su crecimiento futuro. Y es que aunque las pérdidas en tarjetas de crédito parecen estabilizarse, las de los activos ligados al sector inmobiliario comercial crecen todavía, las cuentas siguen siendo opacas y los beneficios de los últimos trimestres se han visto ampliamente favorecidos por las plusvalías (no recurrentes) de la venta de activos. La salida del programa de ayuda implicará además para el trimestre en curso un coste de 0,5 USD por acción.
Para 2009 estimamos una pérdida por acción de 0,20 USD y para 2010 prevemos un beneficio por acción de 0,10 USD.
Cotización en el momento del análisis: 15,19 USD