Cambio de consejo
La fortaleza del euro y el encarecimiento de las materias primas penalizan sus resultados. Ante la ralentización del consumo preferimos recoger beneficios en esta acción que a nuestro entender se ha puesto cara. Venda.
La compañía anglo-neerlandesa Unilever es uno de los gigantes mundiales del sector de bienes de consumo, tanto en alimentación con marcas como Tulipán, Frigo, Knorr o Calvé, como en el cuidado personal (Axe, Rexona, Dove, Pond’s…). El carácter defensivo del sector parece no haber salvado a la cotización de la corrección del mercado a comienzos de año. Inmersa en un plan de reestructuración por el que prevé desprenderse de las filiales menos rentables (en 2006 vendió su filial de alimentos congelados), Unilever incrementó el volumen de sus ventas un discreto 5,5 % en 2007, gracias sobre todo a los mercados emergentes (Asia, África) de donde obtiene casi la mitad de sus ingresos. Sin embargo, la fortaleza del euro y el aumento del precio de las materias primas han estancado el beneficio por acción (sin contar elementos extraordinarios). La compañía cree aún poder combinar el crecimiento y una mejora de la rentabilidad con un ambicioso plan de reducción de costes de aquí a 2010. Nosotros, sin embargo, creemos que en el contexto actual de ralentización del consumo no lo tendrá nada fácil. Creemos que ha llegado el momento de recoger beneficios y vender.
Cotización en el momento del análisis: 20,53 EUR