Análisis

Nueva Rumasa, radiografía de un fraude

El sonado caso de Nueva Rumasa es un claro ejemplo de cómo la falta de transparencia y las promesas de altas rentabilidades pueden esconder un fraude a gran escala.

El sonado caso de Nueva Rumasa es un claro ejemplo de cómo la falta de transparencia y las promesas de altas rentabilidades pueden esconder un fraude a gran escala.

Publicado el  08 julio 2025
Tiempo de lectura: ##TIME## min.

Compartir este artículo

El sonado caso de Nueva Rumasa es un claro ejemplo de cómo la falta de transparencia y las promesas de altas rentabilidades pueden esconder un fraude a gran escala.

El sonado caso de Nueva Rumasa es un claro ejemplo de cómo la falta de transparencia y las promesas de altas rentabilidades pueden esconder un fraude a gran escala.

El sonado caso de Nueva Rumasa es un claro ejemplo de cómo la falta de transparencia y las promesas de altas rentabilidades pueden esconder un fraude a gran escala. Recientemente, la Audiencia Nacional ha dictado sentencia.

Una estafa de más de 300 millones de euros

Hace unos días la Audiencia Nacional dictó sentencia en el juicio del Grupo Nueva Rumasa en la que condena a siete años y cuatro meses de cárcel a seis hijos de José María Ruiz-Mateos, además de otros colaboradores clave, por delitos de estafa, blanqueo de capitales y alzamiento de bienes por la operativa delictiva puesta en marcha para captar fondos para el grupo entre los años 2009 y 2011.

Según la sentencia, a principios del año 2009 la situación económica y financiera del Grupo Nueva Rumasa era muy grave, pues tenía deudas acumuladas por importe de millones de euros y carecía de liquidez para hacer frente a sus compromisos económicos y para sostener la actividad regular de las empresas. Así, ante una deuda de casi 400 millones de euros y una liquidez nula, en 2009 la familia Ruiz-Mateos ideó un “plan”. Lo hicieron a través de agresivas campañas publicitarias a nivel nacional, colocando entre los inversores unos pagarés corporativos con elevados intereses por valor cada uno de 50.000 euros, lo que le permitía evitar el control de la emisión por parte del regulador público, la CNMV, a cambio de invertir en sus sociedades. Pagarés acerca de los cuales nosotros le advertimos en su día para que no invirtiera en ellos . Y, tal y como nos olíamos, al final todo resultó ser una fachada. Pero aun así, el grupo logró captar fondos, unos 300 millones de euros, de más de 4.000 personas.

Demasiado bueno para ser cierto

Este caso subraya la necesidad de que los inversores estén bien informados y sean críticos ante ofertas que parecen demasiado buenas para ser verdad, protegiendo así su patrimonio de posibles fraudes. Para ello, tenga en mente una serie de precauciones:

– No confíe su dinero a cualquiera.

– Investigue a fondo la empresas y sus responsables. Compruebe que esté debidamente registrada para ofrecer esos productos de inversión y que estos estén regulados por organismos pertinentes, como la CNMV.

· Y si usted tiene alguna sospecha sobre alguna propuesta de inversión o no llega a entender del todo recuerde que como socio de OCU Inversiones usted tiene la posibilidad de poder contactar con nuestra Línea Financiera en donde le aclararemos sus dudas. También puede consultar en nuestra web la sección El fraude y sus derechos.

Tome el control de sus inversiones con información y análisis financieros independientes y de confianza, diseñados para ayudarle a tomar decisiones bien informadas. Al suscribirse, recibirá 5 créditos GRATUITOS para acceder a:

  • Estrategia e información financiera independiente
  • Herramientas para lidiar con la volatilidad del mercado
  • Acceso a una cartera virtual con la que lograr el éxito a largo plazo ¡

Acceda el 95% restante de este artículo!

Acceder al contenido

inicie sesión