- Sala de prensa
- ¿Un oro negro barato?
Noticias
Posiciones editoriales
¿Un oro negro barato?
hace 8 años - lunes, 29 de septiembre de 2014
El precio del barril de petróleo ha caído un 16% en los últimos tres meses. ¿Se mantendrá en estos niveles en el futuro? ¿Qué consecuencias tendría para nuestras inversiones?
En condiciones normales, las tensiones geopolíticas entre Occidente y Rusia y el conflicto armado en Irak y en Siria tendrían que haber disparado el precio del petróleo. No ha sido el caso esta vez. Desde los máximos de 115 dólares el barril a finales de la primavera, el precio del barril de petróleo Brent ha caído en torno a los 95 dólares. Una caída que podría acarrear consecuencias tanto para la economía mundial como para sus inversiones. Mucho ha tenido que ver en ello la debilidad de la demanda en los países emergentes, China a la cabeza.
Por su parte, la producción mundial de petróleo no cesa de progresar y debería seguir así en los próximos años. Los grandes países productores, como Arabia Saudí, abren el grifo de sus inmensos pozos. Además, gracias a la utilización de nuevas tecnologías para explotar el gas de esquisto, EE.UU se ha convertido en el productor nº 1 mundial de gas natural y su producción de petróleo ha aumentado en más de un millón de barriles por día en el último año. Sin acontecimientos geopolíticos inesperados, no se espera una escasez de petróleo en el corto y en el medio plazo y el precio del crudo bien podría estabilizarse en niveles inferiores a los últimos años.
¿Quién se beneficiaría de ello? Los consumidores serían los grandes beneficiados: un retroceso en el precio de los combustibles y de la energía sería bienvenida por los hogares. El sector químico sería otro de los claros ganadores, al ser el petróleo la materia prima de numerosos productos (plásticos, caucho…); y la fuente de energía en la producción de estos productos. Las compañías aéreas también saldrían ganando con una reducción de sus costes de combustible. En el bando de los perdedores nos encontramos a las compañías petroleras con mayores reservas (vea análisis sobre Repsol) y la economía rusa, que tiene en los hidrocarburos su principal fuente de recursos.
También puede interesarle: