Noticias Sentencias y actuaciones judiciales

Embargan al Santander para pagar a los perjudicados por un "chiringuito"

Publicado el   29 julio 2010
Tiempo de lectura: ##TIME## min.

Compartir este artículo

Este embargo se produce por no haber consignado ya el banco la suma que, conforme a una sentencia de mayo de 2009, debía haber abonado a 125 inversores que se vieron desplumados cuando confiaron sus ahorros a un "chiringuito financiero".

Por haber contribuido directamente a que un “chiringuito financiero” desplumara a cientos de inversores, la justicia ha ordenado embargar 3,5 millones de euros al Banco Santander para restituir las cantidades confiadas para su gestión.

Le ponemos en antecedentes

Este embargo, ordenado por el Juzgado de Primera Instancia número 21 de Madrid, se produce por no haber consignado ya el Banco Santander la suma que, conforme a una sentencia de mayo de 2009, debía haber abonado a 125 inversores que se vieron desplumados cuando confiaron sus ahorros a un “chiringuito financiero” denominado Capital Intermediate Services (CIS), chiringuito del que allá por el año 2002 ya le advertimos en Dinero Quince Alerta y en nuestro boletín impreso.

La entidad CIS, SGC S.A. daba la sensación de fiabilidad al incluir, por un lado, en su nombre la calificación de Sociedad Gestora de Carteras (SGC), algo que no podía hacer pues no había recibido autorización alguna por parte de la CNMV para captar inversiones, y por otro al tener abierta en el BSCH una cuenta corriente bajo el nombre “CIS clientes” en la que las víctimas ingresaban las inversiones en efectivo pensando que era éste el depositario.


El banco considerado responsable solidario

El caso llegó a los tribunales de justicia y en mayo del año pasado estos dictaminaron que el Santander además de infringir los deberes que en su condición de depositario de la SIMCAV en que luego se transformó esta SGC le imponía la normativa del mercado de valores, cooperó directamente en los graves perjuicios económicos al permitir que CIS siguiera operando ilícitamente a través de esta cuenta pese a estar al corriente de la ausencia de autorización de la sociedad para operar (algo de lo que le advirtió la misma CNMV). Por ello fue considerado responsable solidario de los ahorros perdidos junto con los administradores de la SGC Capital Intermediate Services y de la SIMCAV Hendun 19 (que eran grosso modo los mismos pues una sociedad sucedió a la otra).


Conclusión y consejos

Si ya resulta difícil poner coto a tantísimo chiringuito financiero que pulula dentro y fuera de nuestras fronteras, más ardua resulta la tarea cuando estos operan al amparo de reconocidas entidades bancarias de las que nadie, en principio, podría sospechar que están “contribuyendo”, aunque sea indirectamente, a desplumar a cientos de pequeños ahorradores. Indignante resulta la permisividad del Santander en este caso, con lo que no podemos sino aplaudir este embargo, aunque mejor hubiese sido no tener que llegar a este punto. Y para ello, más vale adoptar una serie de precauciones:

  • Desconfíe de todo tipo de inversión que no conozca, de la que no esté seguro o que le parezca demasiado atractiva como para ser cierta

  • No confíe jamás su dinero a una sociedad que no esté registrada ni controlada por la CNMV, el Banco de España  o la Dirección General de Seguros ya que la inversión no estará cubierta por ningún fondo de garantía. En el caso de que una entidad le suscite algún tipo de recelo, si no está seguro de que esté autorizada o si quiere comprobar si ha sido objeto de advertencia por parte de la CNMV, le será de gran utilidad consultar el “Portal del Inversor” que tiene habilitado en su página web www.cnmv.es