Un poco más optimista pero vigilando los riesgos
Como consecuencia de un consumo sorprendentemente resistente tanto en Estados Unidos como en Europa, de una moderación de los costes energéticos y de la reapertura de la economía china, en sus previsiones de enero el FMI (Fondo Monetario Internacional) ha revisado levemente al alza sus perspectivas de crecimiento global para 2023 hasta el +2,9% desde el +2,7% de su anterior previsión de octubre. Y para 2024 prevé un crecimiento del PIB mundial del +3,1%. Más en concreto, para los EE. UU. estima un +1,4% en 2023 (frente al +1% de octubre) y un +1% en 2024 (desde el +0,8% anterior). Para la eurozona un +0,7% en 2023 (antes un +0,5%) y un +1,6% en 2024 (antes un +1,8%).• En cuanto a la inflación, apunta a una tendencia a moderarse aunque seguirá siendo elevada. Estima que la inflación global descenderá desde +8,8% en 2022 hasta +6,6% en 2023 y +4,3% en 2024, todavía por encima de los niveles prepandemia de +3,5%. Una ralentización que, según el citado organismo, se debe en parte a la disminución de los precios internacionales de los combustibles y las materias primas debido a una demanda mundial más floja. También el endurecimiento de la política monetaria que ejerce un efecto de enfriamiento sobre la inflación. No obstante, pese a la reciente moderación del nivel general de inflación, la subyacente continúa siendo pertinazmente alta en la mayoría de las regiones, se mantiene la rigidez en los mercados de trabajo, los precios de la energía siguen sometidos a la presión de la guerra en Ucrania, y pueden reaparecer perturbaciones en la cadena de suministro. Para mantener estos riesgos bajo control, es probable que deban adoptarse condiciones financieras más restrictivas. De lo contrario, es posible que los bancos centrales tengan que incrementar aún más los tipos oficiales para alcanzar sus metas de inflación.
• En este enlace le presentamos el escenario que barajamos para este 2023 y nuestras recomendaciones para afrontarlo con éxito. Téngalas en cuenta a la hora de diseñar aquella estrategia de inversión que mejor se adapte a su perfil como inversor.