Cómo invertir en el sector consumo
Dentro del sector de consumo, nosotros apostamos por el de alimentación y bebidas
Un sector con dos grandes grupos de empresas
Cuando hablamos del sector consumo hay que diferenciar dos grandes grupos. Por un lado, el de productos básicos, donde se incluyen principalmente las compañías de alimentación, bebidas y productos de primera necesidad (papel higiénico, limpieza del hogar, cuidado personal). Por otro, un consumo más discrecional, de bienes y servicios no esenciales, centrado en productos más duraderos (coches…), relacionados con la vestimenta, el ocio y el entretenimiento. Por tanto, no es café para todos.
Productos básicos, en la diana
La compra de productos no esenciales está muy influenciada por la evolución de la economía. Son bienes cíclicos que, ahora, no tienen precisamente buenas perspectivas por delante. En cambio, el consumo de productos básicos no es tan cíclico. Siempre hay que comer y lavarse, incluso en las peores coyunturas económicas. Es cierto que la crisis sanitaria es inédita y el largo confinamiento de gran parte de la humanidad, con el impulso del teletrabajo y el cierre de bares y restaurantes, lo ha cambiado todo en un sector forzado a adaptar su oferta a los tiempos actuales. Pero confiamos en que podrá sortear la crisis económica sin demasiados daños.
Alimentación y bebidas
Los grandes de la alimentación y bebidas (Coca-Cola, Unilever, Nestlé, Danone) han tenido que afrontar las medidas de confinamiento primero en China y después en todo el mundo. Al principio se beneficiaron del mayor acopio en Europa y EE.UU., pero este efecto positivo se ha ido contrarrestando con el cierre de bares, cafeterías y restaurantes. Salvo Nestlé, las compañías renuncian a sus objetivos de beneficios previstos para el año y prevén un segundo trimestre más difícil que el primero. Los grupos han de asumir además toda una serie de costes adicionales relacionados con la pandemia (logísticos, sanitarios, de materias primas…) que les impedirán alcanzar las mejoras en rentabilidad previstas para este año.
Bienes de primera necesidad
Incluso en una pandemia o una recesión económica el consumidor necesita productos básicos (papel higiénico, productos de limpieza del hogar…). El temor al desabastecimiento provocó un comportamiento de “acaparamiento” ante el que las compañías se vieron obligadas a aumentar la producción para hacer frente a la escasez de ciertos productos. Un efecto positivo que echará el freno en los próximos meses. Y aún es pronto para saber qué productos se beneficiarán del aumento (temporal) de la demanda a corto plazo y cuáles saldrán ganando de los hábitos (más prudentes) del consumidor en esta crisis.