NVIDIA, estrella de la IA, ha publicado un magnífico resultado

¿Debería invertir en la acción de NVIDIA, la mayor capitalización bursátil del mundo, que ha publicado sus resultados trimestrales?
¿Debería invertir en la acción de NVIDIA, la mayor capitalización bursátil del mundo, que ha publicado sus resultados trimestrales?
La acción vale 36 veces el beneficio por acción esperado en los próximos 12 meses, un nivel similar al de principios de 2017, mucho antes del boom de la IA. Un nivel sin duda superior a la media del sector tecnológico (25), pero que nos parece justificado, dado el perfil de crecimiento sin precedentes del grupo.
Tras los resultados trimestrales, hemos revisado al alza nuestras previsiones de beneficio por acción a 2,86 USD para el ejercicio en curso y a 3,60 USD para el siguiente.
Nos parece demasiado tarde para subirse al carro y comprar esta acción. Pero si ya la tiene, asegúrese de que no tenga un peso demasiado grande en su cartera (en cuyo caso, puede recoger una parte de las cuantiosas ganancias acumuladas).
Si no es el caso, MANTENGA.
Las ventas de NVIDIA han pasado de 11.000 millones de dólares hace 5 años a más de 128.000 millones previstos para el ejercicio actual (que finaliza el 31 de enero). Los beneficios por acción han seguido el mismo camino. En el tercer trimestre del ejercicio en curso, las ventas aumentaron un 17% respecto al trimestre anterior y un 94% con respecto al año anterior. El beneficio por acción aumentó un 111% interanual, superando todas las expectativas.
Dado que la demanda sigue superando a la oferta, NVIDIA cobra unos precios elevados por sus chips. Además, el grupo prácticamente no tiene deuda. Y subcontrata la fabricación de los productos que desarrolla a la empresa taiwanesa TSMC. Así en el tercer trimestre registró un margen neto del 55% (frente a menos del 20% de sus competidores).
El inconveniente es su fuerte dependencia de TSMC y el riesgo de problemas de suministro. Este riesgo se ha materializado en la nueva gama de chips Blackwell (el doble de potentes que los Hopper), cuyo lanzamiento se ha retrasado 2 meses. Esto se traducirá en una ligera disminución del margen del cuarto trimestre (aunque se espera que las ventas crezcan un 70% más). Las perspectivas para los próximos años son favorables. Según el director general, J. Huang, el mercado de la IA está aún en pañales. Cada trimestre, los gigantes tecnológicos destinan decenas de miles de millones a inversiones en IA. Y esta cifra aumentará de aquí a 2025.
Dado el éxito de NVIDIA y el tamaño del mercado de chips de IA, la competencia es cada vez mayor. Es probable que esto afecte a la rentabilidad y los resultados futuros de NVIDIA. Los gigantes de los semiconductores más avanzados en este campo son AMD e Intel.
Por otro lado, los gigantes tecnológicos están desarrollando sus propios chips de IA para reducir su dependencia de NVIDIA y los riesgos de suministro. De momento, sus chips se limitan a tareas auxiliares y son complementarios a los de NVIDIA. Amazon lanzó recientemente su chip Trainium2, Google (Alphabet) tiene sus propios procesadores TPU y Meta lanzó su chip MTIA el año pasado.
Por tanto, cabe esperar que en los próximos años se produzca una erosión de la cuota de mercado de NVIDIA y un descenso de su margen operativo. Pero el proceso será lento. No será fácil para los competidores romper la hegemonía de NVIDIA, porque el grupo mantiene sólidas barreras para fijar su base de clientes y cimentar su dominio.
Por un lado, sus soluciones de IA no se limitan a los chips: el grupo ha desarrollado un auténtico ecosistema basado en su lenguaje de programación y software Cuda, que permite a los desarrolladores explotar mejor la potencia de los chips. También ofrece superordenadores (GB200) que contienen chips GPU y CPU propios, equipos de red y la plataforma de software Cuda.
También pretende mantenerse a la vanguardia de la innovación lanzando una nueva gama de chips cada año. En 2026, a las gamas Hopper y Blackwell les seguirá Rubin.
El grupo tiene una sólida posición financiera y está bien posicionado para aprovechar el potencial de la IA. Un mercado que debería alcanzar los 1,3 billones de dólares en 2030 (frente a menos de 200.000 millones en 2024).
Sin embargo, hay que tener en cuenta que los modelos de IA requieren enormes cantidades de energía para funcionar. Y tarde o temprano, esto podría plantear algún problema.
Cotización en el momento del análisis: 136,92 USD
HERRAMIENTA | Consulte esta y otras acciones en nuestro comparador de acciones
Por favor, mántengase a la espera mientras desbloqueamos la página...