Sin embargo, la acción sigue penalizada por las dificultades del grupo para impulsar la rentabilidad con mayor firmeza, así como por la desaceleración de la economía mundial. Acción correcta.
MANTENGA.
Saliendo del bache
El resultado trimestral del grupo Kion es mejor de lo esperado, con un beneficio operativo (excluidos elementos no recurrentes) de 223,6 millones de euros, frente a los 192 millones del segundo trimestre y los 156 millones del primero. Esto sugiere que lo más duro ha quedado atrás, después de un año 2022 marcado por la caída inesperada de la rentabilidad y la cotización.
La actividad de carretillas elevadoras es la que mejores resultados muestra con un incremento de la facturación del 10,1%, beneficiada por el aumento de los precios de venta y de los volúmenes vendidos, así como por las medidas de ahorro y la caída del coste de las materias primas. Se confirma, por tanto, que la reestructuración iniciada en 2022 está dando sus frutos.
En la actividad dedicada a la cadena de aprovisionamiento (cintas transportadoras, etc.), la facturación cayó un 18%, penalizada por la falta de inversiones de las empresas, el menor interés por el comercio electrónico (según el grupo) y la falta de dinamismo en China.
En octubre, el grupo revisó al alza sus previsiones de beneficios en las carretillas, pero las rebajo en la cadena de abastecimiento. A tenor de los avances en su recuperación financiera, el grupo ha revisado al alza sus previsiones de beneficios globales tres veces este año. Por nuestra parte, hemos revisado ligeramente al alza nuestra previsión de beneficio por acción para 2023 hasta los 2,30 euros (frente a los 2,20 anteriores). Para 2024, la mantenemos en 3 EUR.
Cotización en el momento del análisis: 32,35 EUR
