Desde septiembre de 2010, la acción cae un 15%. Dadas las perspectivas, este retroceso no basta para poner a la acción barata. Manténgala.
Gracias a un acuerdo fiscal, la tasa impositiva en 2011 será claramente inferior a lo esperado. Un balón de oxígeno para la compañía británica. Acción correcta. Mantenga.
Hace diez años que las autoridades fiscales americana y británica venían buscando un acuerdo respecto al reparto del pago fiscal de AstraZeneca (41% de sus ventas provienen de EE UU). Al final, el laboratorio pagará 1.100 millones de dólares al fisco americano (unos 50 peniques por acción). Mientras tanto, el grupo británico ya había provisionado una cantidad superior a este efecto. Por tanto, ahora recuperará la diferencia que se reflejará en sus cuentas del primer trimestre.
La tasa impositiva para este año será del 21% (en lugar del 27% previsto). Por tanto, revisamos al alza nuestra estimación de beneficio por acción para 2011 de 375 a 406 peniques. En cambio, mantenemos la de 2012 en 353 peniques.
Este acuerdo resulta favorable para AstraZeneca que afrontará la competencia de los genéricos en varios de sus productos estrella, así como la rebaja de los precios en EE UU y en Europa. Su actividad investigadora, poco acertada, sufre además ciertos reveses como el reciente retraso en la homologación del Brilinta (trombosis) en EE UU.
A la espera de días mejores, AstraZeneca mima a sus accionistas: el dividendo de 2010 aumenta un 14% y la recompra de acciones propias se duplicará en 2011 (hasta el 6% de la capitalización bursátil).
Cotización en el momento del análisis: 2.863 pen.