El grupo borra poco a poco las trazas de la crisis. Frente a su pequeño tamaño, el grupo modifica algo su estrategia. Un movimiento que la bolsa tarda en reconocer. Acción barata e incluida en nuestra cartera.Compre.
La alianza con la china Sinopec anunciada a finales de 2010 (venta de una parte de la filial brasileña) podría ser el inicio de una serie de nuevos acuerdos de cooperación y firmar así el inicio de una nueva estrategia para Repsol. En efecto, frente al aumento de los costes de exploración y un endeudamiento elevado, el grupo ve cómo sus márgenes de maniobra se reducen.
Repsol parece intentar posicionarse cada vez más en la tarea de conseguir capitales ya que su participación en los proyectos se reduce (entre un 20% y un 60%). Una alternativa interesante para hacer frente a las fuertes inversiones necesarias y sobre todo a los nacionalismos crecientes (los países emergentes quieren conservar el control sobre sus reservas).
El nivel de riesgo sería así menor y facilitaría la rentabilidad del grupo. Por otro lado, los recientes cambios en el accionariado no tendrán mucho impacto, ya que La Caixa mantendrá indirectamente un 13% del capital de Repsol y sólo un 1,6% se venderá a inversores institucionales.
Ajustamos nuestras previsiones de beneficio para 2011 y 2012. Estimamos un beneficio por acción de 2,1 EUR en 2011 (frente a 2 EUR) y de 2,27 EUR en 2012 (frente a 2,15 EUR).
Cotización en el momento del análisis: 22,285 EUR