La reestructuración le pasa factura
Los costes de su reestructuración seguirán penalizando sus resultados. Y tiene pendiente una reducción de capital y otra ampliación, cuyo éxito es más que incierto. Futuro opaco para una acción cara y arriesgada. Venda.
En los primeros compases de 2010 las cuotas de sus marcas de aceite han crecido por encima del mercado en España (+12%) y EE UU (+8,3%), mientras que en Italia consolida su liderazgo.
El negocio arrocero, por su parte, se ha beneficiado de los menores precios en origen del arroz y del éxito de ciertos lanzamientos (SOS Bomba en España…).
En el primer trimestre de 2010 SOS ganó antes de impuestos unos 0,03 euros por acción (incluyendo la reciente ampliación de capital) frente a los 0,16 euros que perdió en el mismo trimestre del año anterior.
Sin embargo, el grupo sigue inmerso en un proceso de reestructuración (regulación de empleo en todos sus centros productivos en España), que seguirá penalizando sus resultados en 2010. El grupo se ha comprometido a firmar un acuerdo de refinanciación con sus bancos en la última semana de julio. Una incógnita menos, pero a un mayor coste.
Por otro lado, queda aún pendiente la reducción de capital y una segunda ampliación de capital (la primera fue en junio). Con un precio de emisión similar al de la cotización actual y con una situación financiera de lo más opaca las probabilidades de éxito son escasas, lo que seguirá penalizando a la acción.
Cotización en el momento del análisis: 1,72 EUR