PERFIL
ENI: UN POZO INAGOTABLE
Pese a su relativo reducido tamaño respecto a los gigantes del sector, la petrolera italiana ENI ha sabido jugar con maestría sus cartas y ahora no sólo cuenta con una envidiable capacidad de producción, sino que además tiene asegurado su crecimiento futuro. Puede comprar esta acción, incluida en nuestra cartera modelo.
Diversificación = menos riesgo
El grupo petrolero italiano ENI (17,33 euros) es, por volumen de producción, el séptimo del mundo. Además de dedicarse a las actividades petroleras tradicionales como la exploración y producción, el refino y la distribución y la petroquímica, también se dedica al transporte (a través de sus filiales Snam y Rete Gas) y distribución (Italgas) de gas natural, a la producción de electricidad (Eni-power), a la prestación de servicios a la industria petrolera (Saipem) y a la ingeniería (Samprogetti). Gracias a su fuerte presencia en el sector gasístico y eléctrico (38% de su resultado operativo), está menos expuesta que sus rivales a los altibajos del precio del barril de crudo y del dólar, de ahí el bajo nivel de riesgo que presenta la acción respecto a las otras del sector.
Una envidiable capacidad de producción
Mientras que los tres gigantes del sector, esto es Royal Dutch, Exxon Mobil y BP, están experimentando grandes dificultades a la hora de renovar sus reservas de petróleo y así aumentar su producción, ENI tiene previsto que su producción crezca a razón de un 5% anual. Y es que ahora está recolectando los frutos de esa audaz estrategia emprendida a finales de los 90 cuando apostó, pese a la bajada del precio del petróleo, por reforzar sus actividades de exploración y producción (la principal y más rentable división de ENI). Para ello, compró varias compañías –como Britsh Borneo y Lasmo en la zona del Mar del Norte y Fortum en Noruega- que le han permitido aumentar sus reservas de petróleo y su producción gasística.
Así, ENI cuenta ahora con una capacidad de producción envidiable y sabiamente diversificada (Oeste y Norte de África, Mar del Norte, Mar Caspio) gracias a la cual puede abordar ambiciosos proyectos. Buena muestra de ello es p.ej. su participación (17%) en el proyecto Kashagan en el Mar Caspio, el mayor yacimiento petrolífero que se ha descubierto en los últimos 30 años. Cierto es que la italiana cuenta con una pequeña traba: su limitado tamaño, que le impide alcanzar los mismos niveles de rentabilidad que sus grandes rivales.
Sin embargo, creemos que su rentabilidad mejorará progresivamente gracias a los nuevos yacimientos que explotará a bajo coste (en el Oeste y Norte de África) y a su política de racionalización (se ha retirado de aquellas inversiones no estratégicas, se ha centrado en regiones con mayor potencial de crecimiento…).
Salir airosa de la liberalización
Como antiguo monopolio del Estado italiano (que aún hoy ostenta el 30% de su capital), ENI reinaba en el mercado italiano del gas, embolsándose así unos suculentos márgenes. Pero ahora deberá de hacer frente al proceso de liberalización del sector. De aquí hasta el año 2009 deberá reducir su participación en el suministro y distribución de gas en Italia hasta el 61% (desde el 75% que poseía en 2002), algo que lógicamente pesará sobre sus márgenes. No obstante, creemos que ENI se encuentra preparada para poder afrontar este reto en las mejores condiciones gracias a su presencia en otros mercados prometedores (p.ej. en España a través de Unión Fenosa, en Portugal a través de Galpenergia o con GVS en Alemania) y a su participación en los gasoductos "Blue Stream" (Rusia- Turquía) y "Green Stream" (Libia- Italia), que le permiten aprovisionarse de gas a buen precio.
Además, en Italia ha creado una división "energía" a través de la cual construirá, para sus plantas de refino y petroquímicas, centrales para la producción de electricidad y de vapor mediante gas. Gracias a ello, ENI producirá energía a bajo coste que podrá revender o utilizar en sus propias fábricas.
Y lo más importante, el gas que consuma de esta forma no será tenido en cuenta a la hora de calcular su cuota de mercado en Italia que debe reducir como consecuencia de la liberalización del sector.
ENI (línea gruesa; base 100) Y EL SECTOR PETROLERO MUNDIAL
Desde principios de 2002, la petrolera italiana se ha desmarcado del sector. La acción nos parece correcta y merece nuestro consejo de compra.
¡Con cuerda para rato!
Frente a los mediocres resultados de la mayoría de las compañías petroleras, en 2003 ENI superó incluso nuestras previsiones al obtener un beneficio corriente de 1,46 euros por acción (+21% respecto a 2002). El incremento de su producción (+6,1%) y la subida de los precios de los hidrocarburos le han permitido compensar la caída del dólar y las pérdidas de su división petroquímica.
Para este 2004, aunque el precio del barril de petróleo esperamos que se mantenga en torno a los 30 dólares USD, la tendencia bajista del euro frente al billete verde podría lastrar los beneficios de las petroleras europeas. Por ello, nos mostramos prudentes y hemos rebajado nuestras previsiones de beneficios hasta 1,32 euros por acción para este año en curso. Pero aun así, la acción sigue mereciendo nuestra confianza. Aunque su tamaño limitado sigue siendo su principal handicap, a la vista de su acertada estrategia pasada, estamos convencidos de que logrará mejorar su rentabilidad para aproximarse a la de sus rivales. Si además tenemos en cuenta su acertada reacción para adaptarse a la nueva situación del mercado del gas en Italia, el bajo nivel de riesgo que conlleva la acción y su alta rentabilidad por dividendo, no podemos sino corroborar nuestro consejo de compra. Puede comprar esta acción, incluida en nuestra cartera modelo, en la Bolsa de Milán, código ISIN: IT0003132476.