La aerolínea de bandera española Iberia (1,77 euros) es líder en las rutas entre Europa y Latinoamérica con un 16% de cuota de mercado.
Los resultados de la compañía en el segundo trimestre nos han sorprendido gratamente. El beneficio operativo neto aumentó en un 51%, gracias al estricto control de costes (- 6%), la mayor productividad y una modernización y homogeneización de su flota. Para el conjunto del semestre, el beneficio total se ha multiplicado por 17 hasta alcanzar los 0,0777 euros por acción. A pesar de estos brillantes resultados, el negocio de Iberia se ve amenazado en el futuro más inmediato por tres frentes: una caída del turismo más fuerte de lo esperado en julio (el número de pasajeros disminuyó en un 8,6%), el incremento de la competencia de las empresas de bajo coste en los vuelos entre España y el resto de Europa y finalmente la subida del precio del crudo (+24% desde principios de año). Aunque el potencial de Iberia nos sigue pareciendo interesante a largo plazo (presencia en mercados prometedores, flexibilidad de la gestión…), estas incertidumbres pueden llevar a la cotización a atravesar ciertas turbulencias a corto plazo. Aunque puede mantener esta acción correcta con vistas al largo plazo, por ahora preferimos no comprar.
IBERIA/SECTOR AEROLÍNEAS
Iberia (negrita; base 100) ha tomado más altura que el resto del
sector. Puede mantenerla, pero no compre.