De ahorrador a inversor: guía para el inversor novato

Que el nombre no le lleve a conclusiones erróneas. Los seguros de ahorro tienen su aquel y puede perder dinero con ellos,
Mucho de ahorrador y poco de inversor
El ciudadano español de a pie suele tener mucho de ahorrador y poco de inversor. Una estrategia a todas luces equivocada y que en el contexto actual de bajos tipos de interés resulta aún más desastrosa si cabe. A este tipo de ahorradores, la fiesta del dinero gratis les sale muy cara. Si usted es de aquellos ahorradores que cree que ha llegado el momento de pasarse al bando de los inversores y conseguir una mayor rentabilidad por su dinero, le damos las pautas a seguir y le proponemos una serie de estrategias inversoras. A la larga, su bolsillo se lo agradecerá.No se conforme
En nuestro país los datos cantan: más de la mitad del ahorro de las familias españolas está en productos de riesgo muy bajo que no genera rendimiento alguno o, peor aún, asegura perder poder adquisitivo cada año.• Sacrificar rendimientos futuros a cambio de mayor seguridad no es una buena estrategia si la aplica a todos sus ahorros.. En el caso de que usted haya tomado conciencia de ello, y decidido dar el paso para ir más allá, deberá apostar por una estrategia inversora basada en la diversificación entre acciones y obligaciones que, en el contexto actual, implica asumir algo más riesgo que en el pasado. Pero ¿por dónde empezar?
Una reserva de liquidez
Antes de embarcarse en el mundo de la inversión, nuestro primer consejo, y quizás el más importante, es que se asegure de contar con una reserva de liquidez – un dinero disponible en cualquier momento sin penalización alguna – con la que hacer frente a gastos imprevistos. ¿De qué cantidad estamos hablando? Dependerá de cada caso. Una liquidez razonable podría ser el equivalente a tres meses de sus ingresos mensuales.• Esta reserva de liquidez ha de poder recuperarse en cualquier momento sin penalización y debe resultar lo más rentable posible, sabiendo que deberá contentarse con rendimientos para este dinero que no serán boyantes. Puede optar por una cuenta remunerada. Consulte el comparador de depósitos.
El plazo: al menos 5 años
Si dispone de una reserva de liquidez, el resto del dinero ya puede invertirlo. Y aquí va nuestro segundo consejo para el novato, no dude en dar cabida a las acciones entre sus inversiones ya que así puede aspirar a un rendimiento mayor. Este rendimiento será más ambicioso si dedica todo ese dinero a las acciones, más que si lo dedica parcialmente con una cartera mixta (acciones y renta fija), y más aún que si las excluye completamente e invierte sólo en renta fija. Sin embargo, su riesgo es también mucho más elevado y sólo el largo plazo lo atenúa, al compensarse los aciertos con los fallos (o las etapas de euforia alcista con las de pesimismo bajista). Por ello nosotros fijamos un plazo de referencia que son al menos 5 años idealmente 10 en las estrategias con un mayor peso en acciones o incluso 15 o 20 años vista cuando las acciones son el único ingrediente.• Si usted no va a aguantar su inversión todo este plazo, creemos que los mayores beneficios potenciales de la inversión en acciones no se ven compensados por su riesgo y debería optar – salvo que usted quiera especular – por una alternativa sin riesgo como la especificada en nuestro perfil ahorrador. Este perfil recoge los mejores productos de nuestro selector de depósitos y del comparador de obligaciones,
¿Cuánto? Poco a poco
Si usted no ha invertido nunca en acciones o fondos de acciones, no se lance a la piscina de golpe. A la hora de aventurarse a invertir en Bolsa, lo más razonable es hacerlo con una cantidad limitada de dinero para familiarizarse con los altibajos bursátiles y no ceder al pánico ante las eventuales correcciones ni caer preso de la euforia en momentos de subidas. Y es que precisamente, al contrario de lo que hace la mayoría de los inversores, lo más interesante es invertir en Bolsa una cantidad mayor tras una caída bursátil e ir reduciendo su peso cuando está subiendo.• En efecto, uno de los mayores retos para un inversor novato es acostumbrarse a las fluctuaciones de los mercados financieros y al impacto en su patrimonio. Considere, por ejemplo, introducirse en Bolsa dedicando una décima parte de esos ahorros. Así, p.ej. si su inversión bursátil cayera un 15% debido a una corrección, esto supondría solo una caída del 1,5% en su patrimonio total invertido. De este modo irá adquiriendo la experiencia necesaria sin arriesgar gran parte de su patrimonio. Y al cabo del tiempo acabará comprobando que a largo plazo invertir siguiendo una adecuada diversificación le permitirá rentabilizar su patrimonio pese a las eventuales pérdidas que entretanto pueda experimentar en intervalos cortos de tiempo.
Siempre que sea diversificando
Todo inversor a largo plazo que se precie debería grabarse a fuego que una estrategia global en la que puedan tener cabida las acciones, las obligaciones, y las distintas divisas de todo el mundo es la mejor forma de rentabilizar su dinero. Si se tiene muy claro cuáles son aquellas bolsas, divisas y renta fija más interesantes en cada momento, crearse una cartera bien diversificada no resulta muy complicado.• Pero llegar a averiguarlo de forma correcta y acertar en el blanco a la hora de combinarlos en función del riesgo que se esté dispuesto a asumir, ya no resulta tan intuitivo. Y aún le quedaría un último esfuerzo a realizar a modo de guinda del pastel: escoger el producto adecuado con el que acometer cada una de las inversiones.
¿Qué hacer entonces?
Conscientes de lo ardua que puede resultar tal labor, nosotros hacemos todo ese trabajo por usted y le ofrecemos una serie de estrategias de inversión con las que tratamos de cubrir los posibles perfiles de riesgo de cualquier inversor que se precie. Desde aquel que no puede correr ningún riesgo al cual le proponemos un perfil ahorrador a aquellos que por tener la vista puesta en el largo plazo pueden asumir más riesgo.
• Ahora bien, antes de hablarle de nuestras estrategias es importante que asimile el alcance del concepto “riesgo”. Si para usted el riesgo consiste en la posibilidad de terminar con pérdidas su inversión, podemos decirle que nuestras carteras tienen tanto riesgo como un depósito… siempre que las mantenga el plazo para el que están diseñadas. Otra cosa son los altibajos que puedan sufrir mientras tanto.
Entender el riesgo
El riesgo es la posibilidad de obtener un resultado que difiera del que se espera de dicha inversión. A mayor dispersión de resultados posibles, más arriesgada es dicha inversión. Así, p.ej. tiene más riesgo una inversión en la que puede obtenerse un resultado entre el -14% y +26% que otra que produzca entre un +0,3% y un 1%, y ésta más que otra que ofrezca un +0,4% fijo. Ahora bien, la mecánica real de las inversiones es que, en aquellas con más riesgo, la dispersión de resultados se reduce conforme avanzan los años y en nuestro ejemplo la primera inversión al cabo de un año bien puede obtener entre un -14% y +26%, pero al cabo de 5 años el rendimiento medio anual puede haber oscilado entre -6% y +18%, y al cabo de 10 entre el +2% y +10%… mientras que con la tercera obtendría siempre un +0,4%.
Una vez que ha decidido dar el paso y pasar de ser ahorrador a inversor, para que en función de los altibajos que esté dispuesto a asumir a medio plazo no llegue a perder el sueño, le proponemos diversas estrategias mixtas. Estas se diferencian entre ellas en la intensidad de los altibajos que son susceptibles de sufrir en el corto y medio plazo.