España: crecimiento y proyecciones
En el tercer trimestre del año el PIB español creció un 0,1% con respecto a los tres meses anteriores según el dato definitivo publicado por el INE (Instituto Nacional de Estadística), una décima menos que el dato avanzado en octubre. Esta tasa definitiva es 1,9 puntos inferior a la registrada en el segundo trimestre del año. Este menor crecimiento trimestral se debe a la desaceleración del consumo los hogares, pues sólo aumentó un 0,1%, lo que supone 1,6 puntos menos que en el trimestre anterior. Con ello, la variación interanual del PIB se sitúa en el 4,4%, algo más que el 3,8% avanzado en octubre, pero bastante inferior al 7,6% del trimestre precedente. La contribución de la demanda nacional -consumo e inversión- al crecimiento interanual del PIB es de 0,9 puntos, 1,6 puntos inferior a la del segundo trimestre. Por su parte, la demanda externa una aportación de 3,6 puntos, 1,5 puntos inferior a la del trimestre pasado.
• Por su parte, el Banco de España ha publicado sus proyecciones económicas de diciembre. Según estas, ha revisado ligeramente al alza crecimiento del PIB en 2022 hasta el 4,6% (antes 4,5%). En cambio, revisa ligeramente a la baja el crecimiento previsto para 2023 hasta el 1,3% (antes 1,4%) por el empeoramiento del contexto exterior y a pesar del efecto de signo contrario debido a la extensión en 2023 de una parte de las medidas en vigor durante 2022 para reducir el impacto de la crisis energética. La retirada de estas medidas al inicio de 2024 tendrá un leve impacto negativo sobre la actividad, lo que le lleva a revisar algo a la baja el crecimiento medio en ese año hasta el 2,7% desde el 2,9% anterior. En cuanto a la inflación, ha revisado a la baja tanto su previsión para 2022 (8,4% desde el 8,7%) ante la tendencia bajista de los últimos meses como para 2023 (4,9% desde el 4,2%) por la prórroga de parte de las medidas para minorar el impacto de la crisis energética, cuya retirada en 2024 da lugar a una revisión al alza de la inflación en dicho ejercicio hasta el 3,6%.
• En cuanto a los mercados de deuda, los tipos a largo plazo, los de las obligaciones a 10 años, volvieron a repuntar y cerraron la semana pasada en el entorno del 3,42% desde el 3,24% de la anterior.
En el exterior
• En el Reino Unido, la economía se contrajo un -0,3% en el tercer trimestre del año respecto al mismo periodo de 2021. Con una inflación especialmente elevada, unos hogares con ingresos a la baja en términos reales y un ahorro que van incrementando ante su desconfianza de cara al futuro, una inversión a medio gas y un sector público con muy poco margen de maniobra, es probable que la economía británica acabe el año con una nueva caída del PIB.
• En los EE. UU ha sido revisado al alza el dato de crecimiento económico del tercer trimestre. Entre julio y septiembre creció finalmente un 3,2%, en lugar del 2,9% previsto (variación trimestral anualizada). Pero los mercados, en vez de reaccionar positivamente, lo hicieron aflojando el paso al ver en esta revisión una prueba de que la economía es lo bastante fuerte como para que la Reserva Federal siga subiendo sus tipos de interés oficiales.
• El Banco de Japón ha sorprendido a los mercados al relajar uno de los objetivos de su política monetaria. Respecto a los tipos ofi-ciales no hay novedades y los mantiene en el -0,10%. Donde si las hay es en lo que respecta a los tipos a largo (a 10 años). Hasta ahora su intención era mantenerlos en el 0% hasta que la infla-ción se situara en el 2%, con un margen que podría oscilar entre el -0,25% y el +0,25%. Pues bien ahora, ante un yen bajo presión y una inflación que en noviembre se situó en el 3,8%, ha decidido incrementar ese límite de rentabilidad al que puede llegar el bono japonés con vencimiento a 10 años hasta el 0,5%. Por primera vez desde 2014, los rendimientos de los bonos japoneses podrían moverse en torno a esos niveles (de hecho, después de este anuncio, repuntaron desde el 0,25% hasta el 0,4%).
Nuestros consejos
La Bolsa de Londres, compuesta en su mayor parte por multinacionales poco expuestas a la economía británica y con una fuerte presencia en sectores como las materias primas, está sufriendo mucho menos que las de la zona euro en su conjunto y la estadounidense en lo que va de año (vea "Cuáles son las mejores y perores bolsas en 2022"). Seguimos invirtiendo en acciones británicas en todas nuestras estrategias de inversión.