Iberdrola se adapta a los nuevos vientos

Apuesta por la energía eólica marina

Pese a la crisis sanitaria, Iberdrola no cesa en su estrategia de crecimiento y diversificación internacional. En apenas unos meses, ha llegado a acuerdos con la eléctrica polaca Enea y la sueca SVO para desarrollar de forma conjunta 12,3 gigavatios (GW) en parques eólicos marinos (a cierre del primer trimestre del año, su capacidad total de generación era de 46,1 GW, de los que, pese a ser uno de los líderes mundiales, sólo 1,1 GW eran de origen eólico marino).

Inversiones en mercados en crecimiento

Por otro lado, Iberdrola ha comprado activos eólicos en Francia y ha lanzado una OPA sobre la australiana Infigen (energía eólica, solar). Mercados en crecimiento y apuesta por las energías renovables son los puntos en común de todas estas operaciones. Una estrategia acertada con la vista puesta, eso sí, a muy largo plazo: la mayoría de estos nuevos proyectos no entrarán en funcionamiento, como muy pronto, hasta finales de la década. En el lado negativo, el aumento del endeudamiento que implica llevar a cabo estas inversiones. Sin embargo, los bajos tipos de interés y la capacidad de generar economías de escala juegan a su favor.

Cotización en el momento del análisis: 10,25 EUR

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Iberdrola es hoy un grupo multinacional líder en el sector energético. La compañía apuesta por ser líder en energías limpias (es la primera productora renovable entre las utilities europeas, líder mundial por potencia eólica terrestre instalada). Está presente en Reino Unido (Scottish Power); EE. UU. (Avangrid) y Latinoamérica, en especial en Brasil (Neoenergía).