Tras las malas sorpresas de la primavera, los resultados semestrales de
Ekopak también decepcionaron con una caía de la facturación del 33,4% respecto al primer semestre de 2024. Un descenso que Ekopak atribuye a una concentración excepcional de la facturación en mayo y junio de 2024, así como a un aplazamiento de proyectos (-42,5% de facturación en nuevas instalaciones) a causa de la incertidumbre geopolítica y comercial.
Aunque todavía relativamente limitada, la actividad recurrente (entre ellas, Water as a Service, WaaS) registró un aumento del 9,7 %.
Esta contracción de la facturación ha pesado fuertemente sobre la rentabilidad y ha profundizado la pérdida neta (0,41 euros por acción).
No obstante, la facturación aumentó un 44% en comparación con el segundo semestre de 2024, y el grupo prevé un crecimiento en el conjunto del año. Tres proyectos WaaS se pusieron en marcha en el primer semestre y a 30/06 la cartera de pedidos de nuevos proyectos había aumentado considerablemente (entre ellos, un gran contrato en Estados Unidos).
Nada ha trascendido, en cambio, sobre el incierto proyecto Waterkracht en el puerto de Amberes.
Ekopak también ha tomado medidas para acelerar el crecimiento y optimizar el funcionamiento (entre ellas, un programa de racionalización de costes).