A pesar de que la situación sectorial ya no es tan buena, los resultados son positivos. Galp sigue comprometido con la transición energética y su estrategia ya apunta en esa dirección. Acción correcta.
MANTENGA.
Semestre mejor de lo esperado
Galp ha obtenido unos resultados semestrales ligeramente superiores a las expectativas, con un beneficio que alcanzó los 0,76 euros por acción. Esta cifra supone una caída del 15% respecto al mismo período de 2022 pero, sin tener en cuenta factores no recurrentes relacionados con la venta de activos en Angola y las inversiones financieras, y sobre todo sin el efecto contable muy volátil de la valoración de las acciones, el beneficio aumentó un 21% hasta los 0,64 euros.
A nivel operativo, la facturación cayó un 21% y el beneficio operativo cedió un 16% debido a la venta de los activos en Angola y a un contexto sectorial menos favorable. En efecto, el precio del petróleo cayó un 30% y la producción un 4%, el margen de refino de la empresa se mantuvo elevado, pero cayó un 14%, y los precios del gas y la electricidad también retrocedieron.
En el lado positivo destacamos los beneficios en la comercialización de gas, debido a los contratos ya firmados, y el crecimiento de las energías renovables y los nuevos negocios.
A nivel financiero, la deuda neta cayó un 12% en el primer semestre, incluso después de la recompra de acciones propias y el reparto de dividendos. La situación del grupo se ha visto reforzada tras la desinversión de algunos activos, lo que le permite seguir invirtiendo en la descarbonización, que es un gran pilar estratégico de futuro.
Tras estos resultados, Galp mantiene sus estimaciones para este año. Nosotros, sin embargo, revisamos ligeramente al alza nuestra previsión de beneficio por acción de 1,24 a 1,27 euros para 2023 y de 1,18 a 1,20 para 2024.
Cotización en el momento del análisis: 12,59 EUR
