Entrar en un proceso judicial suele llevar bastante tiempo y quebraderos de cabeza. Le aconsejamos que se asesore por profesionales independientes de las posibilidades que tiene de ganarlo, de lo que puede llegar a costar y de los pasos a dar para no alargar innecesariamente el proceso.
En los juicios que la Ley de Enjuiciamiento Civil prevé como juicios verbales por razón de su cuantía, y si ésta no excede de 2.000 euros puede acudir usted mismo a pleito compareciendo sin abogado ni procurador. Esto no es posible en juicios que son "verbales" por razón de su materia, con independencia de la cuantía, como por ejemplo los juicios de reclamación de rentas de alquiler o de desahucio por falta de pago o expiración de plazo, etc.
Para poder acceder a un juicio verbal se debe presentar una demanda sucinta, cuya elaboración es bastante sencilla, como se aprecia en el modelo adjunto. Los elementos esenciales que debe contener son dos:
a) los datos y circunstancias de identificación del actor (demandante) y del demandado, con indicación del o los domicilios donde puedan ser citados;
b) expresar con claridad y precisión lo que se pide.
Como regla general, el impreso o escrito de demanda deberá presentarlo en el Juzgado de Primera Instancia del domicilio del demandado. Cuando se dirijan contra sociedades, empresarios o profesionales por sus actividades podrán también presentarse en el Juzgado de Primera Instancia del lugar donde desarrollen su actividad.