Nuestra apuesta por las acciones británicas por ahora solo tiene cabida con un peso limitado dentro de una cartera dinámica.
Publicado el 13 mayo 2024
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Nuestra apuesta por las acciones británicas por ahora solo tiene cabida con un peso limitado dentro de una cartera dinámica.
La economía británica consigue salir de la recesión, pero su situación continúa siendo delicada.
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En Reino Unido el crecimiento del 0,6% frente al trimestre anterior y del 0,2% en comparación con 2023 pone fin a la recesión que marcó el segundo semestre de 2023. El repunte afecta, tanto a los servicios como a la producción industrial. Si bien el gasto de los consumidores aumenta (+0,2% frente al trimestre anterior), es en el comercio exterior (+0,6%) donde se encuentra la mayor contribución al crecimiento. Debido a la débil demanda interna, las importaciones (-2,3%) caen más fuerte que las exportaciones (-1%), lo que no es tranquilizador. Ante estos números mixtos, la presión sobre el Banco de Inglaterra para iniciar el movimiento de reducción de tipos se intensifica. Ha señalado claramente una primera reducción en junio, seguida de otras más adelante en el año. Esto podría debilitar a la libra. Dado que la situación económica británica sigue siendo delicada, solo invertimos en ella dentro de nuestra cartera dinámica.
