Pero el grupo no podrá escapar al impacto de la esperada caída de los precios del petróleo en comparación con los niveles de 2022. Los objetivos de beneficios para 2027 son por tanto más modestos. La acción cotiza a 10 veces el beneficio esperado para 2023, frente a 8,5 veces del sector. Tras subir un 69% desde principios de año (momentum positivo), el inversor más prudente puede recoger beneficios y vender una parte de esta inversión. A largo plazo, la acción está correcta.
MANTENGA.
Exxon Mobil ha presentado su plan estratégico para los próximos 5 años. Al contrario que las petroleras europeas cuyos planes dan prioridad a las energías renovables, el grupo estadounidense apuesta claramente por la exploración de hidrocarburos. En efecto, el crecimiento de Exxon pasa principalmente por aumentar su producción en 500.000 barriles diarios durante este periodo hasta alcanzar los 4,2 millones de barriles diarios en 2027 frente a los 3,7 millones previstos en 2022 y 2023.
La mitad de este incremento procederá de sus mercados preferentes, que son la cuenca pérmica de EE.UU. (Texas, petróleo de esquisto), Guyana (América del Sur), Brasil y el gas natural licuado (GNL), entre otros, en Qatar. Según la dirección de la petrolera americana, la demanda de GNL se mantendrá fuerte en los próximos años debido a las necesidades de Europa y Asia, lo que debería contribuir a impulsar los precios.
Para 2027, el grupo se muestra menos ambicioso con el objetivo de alcanzar un beneficio por acción de unos 2,2 USD, duplicando el beneficio de 2019, un año muy bajo. La buena remuneración del accionista sigue en el ADN de Exxon y justifica en gran medida nuestro consejo sobre esta acción. El grupo amplía su plan de recompra de acciones de 30.000 a 50.000 millones de dólares para el periodo 2022-2027. Y confirma el aumento del dividendo en los próximos años.
Cotización en el momento del análisis: 106,09 USD
Vea la información clave de esta acción
