Tintes para el pelo: entérate de qué compras

Si te tiñes el pelo en casa conviene que sepas cuál de todos los tintes que hay en el mercado te conviene. Sintéticos o naturales, permanentes o de los que se van a los pocos lavados. ¿Cuál elegir? Todo depende del resultado que quieras conseguir. En esta guía tendrás toda la información general de tintes que te ayudarán a elegir.
Tipos de tintes
Los tintes permiten cambiar el tono natural de tu pelo y también cubrir esas canas que empiezan a molestar. Puedes acudir a la peluquería para que te tiñan o hacerlo tú mismo en casa, lo que te saldrá más económico. Lo difícil será saber escoger entre las decenas de tintes que te ofrece el mercado. Te ayudamos a tomar esta decisión, pero primero tienes que tener claro, qué quieres y qué necesitas.
¿Qué tinte escoger?
Antes de decantarte por un producto u otro, hazte estas preguntas. ¿Quiero que la coloración me dure mucho o poco? ¿Quiero cambiar mucho o poco de color? ¿Quiero teñirme para cambiar de color o para cubrir canas? ¿Quiero evitar algún ingrediente por alergia o sensibilidad? De las respuestas que hayas dado, dependerá la elección del tinte.
Según su duración Piensa en si de verdad quieres un cambio de color radical durante mucho tiempo o solo una temporada. Con permiso de las raíces eso sí.
Este tinte es perfecto si lo que quieres es acentuar el tono de tu pelo o cambiarlo radicalmente. Si quieres cubrir al 100% tus canas es la mejor opción ya que no se va fácilmente con los lavados. Lo menos práctico es el “efecto raíz”, ya que hay que aplicarse el tinte a medida que vaya creciendo el pelo. En su composición incluye un agente oxidante (agua oxigenada), un agente alcalino (amoniaco u otro ingrediente similar) y los colorantes.
Este tipo de tinte sería suficiente, si no quieres un cambio de color radical y aún no se te notan mucho las canas. Se usan para acentuar o dar un color similar o más oscuro a tu tono de pelo. También para matizar la raíz que queda sin teñir cuando crece el cabello. Resisten por lo menos 4 lavados. No sirven para aclarar el tono del cabello.
Según sus sustancias colorantes. ¿Qué tipo de producto quieres ponerte en el pelo? Los naturales y los minerales tienen una gama pequeña de colores, en cambio con los sintéticos la variedad es más amplia.
La variedad de colores a elegir es muy amplia. Son los más agresivos para el cabello, puesto que se basan en decolorar y teñir simultáneamente mediante una reacción de oxidación. Para quitarse esa fama de agresivos, la tendencia del mercado es sustituir el amoniaco por otro agente alcalino, en realidad muy similar a este, o incorporar ingredientes naturales, aceites o proteínas de plantas, con efecto suavizante o reparador del cabello.
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Tipos de tintes
Los tintes más vendidos son sintéticos permanentes. Quizás porque sus resultados son más duraderos y eficaces gracias a los oxidantes y colorantes de su composición.
De hecho, para aplicarte bien el producto debes mezclar los dos botes de su interior (el bote del oxidante y el bote del colorante). A veces también hay otro que es el acondicionador. Te decimos para qué sirve cada uno de ellos.
El ingrediente oxidante suele ser agua oxigenada (o peróxido de hidrógeno) a una concentración diferente según el aclaramiento que se quiera conseguir.
Esta sustancia es capaz de decolorar los pigmentos naturales de cada pelo (melanina), oxidándolos. La melanina es el pigmento que colorea la piel, ojos y cabello. Y además oxida los colorantes del tinte, que serán los que nos darán el color deseado.
Los colorantes son sustancias como el PPD (parafenilendiamina), diaminofenoles, metilfenilendiaminas o diaminotoluenos. Todas sustancias incoloras o débilmente coloreadas que, al mezclarlas con el agua oxigenada, se oxidan y adquieren su color definitivo.El agente alcalino normalmente es amoniaco. Aunque la mala fama de este compuesto hace que cada vez se utilice menos y se sustituya por otro compuesto alcalino, como la etanolamina que no tiene el olor característico y desagradable del amoniaco.
Suele incluirse en el envase del tinte para después del aclarado. Su función es suavizar, facilitar el peinado, tanto en mojado como seco, dar brillo y mejorar la estética del cabello. Ayuda también a mejorar la durabilidad del tinte, puesto que cierra las escamas de la cutícula después del proceso de coloración.
Pero como todo, aunque esta opción sea la más eficaz es importante que conozcas los puntos más y menos favorables de elegir este tipo de tinte.
Pros:
- Son los únicos tintes capaces de dar al cabello una gran variedad de tonos.
- El color que aportan es definitivo.
- Resiste mejor los lavados y otros factores externos como la luz del sol y el rozamiento.
- Cobertura elevada de canas, cercana al 100%.
Contras:
- Se necesita realizar otra coloración al mes para teñir el cabello que nace (las "raíces").
- Aunque han mejorado, siguen siendo los tintes más agresivos para el cabello. De hecho, algunos de sus ingredientes están restringidos.
- Su principal riesgo son las alergias y reacciones de sensibilidad.
Alguno de los ingredientes de los tintes puede provocar alergias o irritaciones. Precisamente por eso, en la UE existe una regulación para los cosméticos que especifica qué sustancias están prohibidas y cuáles deben usarse en condiciones restringidas, para evitar daños en la salud.
Estos son los más problemáticos:
Como los diaminobencenos, para-aminodifenilamina, (PAD), la o-nitro-p-fenilendiamina (ONPPD) y la paratoluendiamina (PTD). Su presencia es casi una constante en los tintes de color oscuro y mucho más escasa en los de color rubio. La p-phenylenediamine o PPD ha demostrado ser un alérgeno de contacto extremadamente potente, se reconoce que las reacciones alérgicas que puede producir pueden ser severas. Además, p-phenylenediamine es un agente sensibilizante extremo. Por eso, solo se permite su uso hasta el 6 % de la composición. Su presencia ha de indicarse en las cajas, advirtiendo que “pueden provocar una reacción alérgica”, "contiene diaminobencenos” y “no utilizar para teñir cejas y pestañas”.
Su concentración máxima, según la regulación de cosméticos, está restringida al 10% en los colorantes de oxidación para el teñido del cabello. Su uso obliga a advertir en el etiquetado “puede provocar reacción alérgica”, “contiene diaminotoluenos” y “no utilizar para teñir pestañas o cejas”.
También están restringidos al 10%, cuando son utilizados como colorante de oxidación para teñido del pelo. Y debe llevar una advertencia en el etiquetado con los siguientes mensajes: “puede provocar reacción alérgica”, “no utilizar para teñir pestañas o cejas”.
Su concentración máxima en producto terminado es del 5%. Cuando está presente, deben aparecer las siguientes advertencias en el etiquetado: “contiene resorcinol”, “aclarar bien el pelo después de su aplicación”, “no utilizar para teñir pestañas o cejas”, “enjuagar inmediatamente los ojos cuando el producto entre en contacto con estos”. Además el resocinol está clasificado como disruptor endocrino, por lo que es mejor evitarlo.
Son un grupo de sustancias que se usan como conservantes en los cosméticos y productos de cuidado personal. El problema es que se sospecha que algunos de ellos pueden ser disruptores endocrinos, químicos que podrían penetrar en nuestro organismo e interferir con el sistema hormonal.
Los más problemáticos son butyl y propylparaben. Como recomendación, sugerimos evitar estos ingredientes en productos que se dejan sobre la piel o como ocurre con los tintes que, aunque se aclaran, permanecen previamente un tiempo sobre el cuero cabelludo. o.
Si el tinte contiene amoniaco en el listado de ingredientes leerás ammonium hydroxide (hidróxido de amonio). Por ley no puede rebasar una concentración del 6 % y si supera el 2 % el fabricante debe indicar en el envase “contiene amoniaco”.
Entre sus ventajas está que reacciona igual en cualquier tipo de pelo, garantizando así el tono anunciado. Sin embargo, huele fatal y su inhalación puede resultar irritante para las vías respiratorias y su contacto para la piel. Aunque el riesgo es mucho mayor para los peluqueros que para los usuarios esporádicos puesto que la exposición es más duradera.
Llama la atención que muchos tintes anuncian no llevar amoniaco como si fuera garantía de que se trata de un producto más sano y natural. Sustituyen el amoniaco por otras sustancias alcalinas, como etanolamina, que tiene la misma función.
En cuanto al agua oxigenada, en su etiquetado aparece como hydrogen peroxide (peróxido de hidrógeno). Todas las mezclas y compuestos que contengan agua oxigenada deben ir acompañados de las siguientes advertencias: “utilizar los guantes apropiados”, “contiene peróxido de hidrógeno”, “evitar todo contacto con los ojos”, “enjuagar inmediatamente los ojos si el producto entra en contacto con estos”.
Los tintes persiguen una retahíla de medias verdades que creemos conveniente que sean resueltos.
La idea de que los tintes sintéticos o “químicos” son peligrosos para la salud o incluso cancerígenos está muy extendida. Pero ¿qué hay de cierto?
La realidad es que no son cancerígenos. La Comisión Europea ya determinó que el riesgo de aparición de ciertos tumores en peluqueros era bajo. No hay pruebas de que llegue a afectar a la población.
No existen pruebas de que el amoniaco sea un agente sensibilizante, ni cancerígeno. El reclamo "sin amoniaco" quiere decir que simplemente sustituyen este reactivo por otros parecidos, que huelen algo menos, como la etanolamina y que por cierto su seguridad no está tan estudiada. Pero al ser algo menos eficaz, estos tintes precisan de mayores concentraciones de colorante o de más tiempo de exposición, con lo que la ventaja es dudosa. Si te dicen que no llevan amoniaco que no te engañen, no es garantía de que se trate de un producto más sano y natural.
Prácticamente todos los tintes son coloraciones químicas, con los colorantes, oxidantes y sustancias alcalinas imprescindibles para cumplir su cometido. Por eso los fabricantes utilizan estrategias para poder transmitir la idea de que sus productos tienen algo de natural. Que no te confundan sus tácticas.
- Resaltar los ingredientes de origen natural, como aceites, queratina, soja o colágeno. Una parte de ellos son acondicionadores del cabello y pueden contribuir a reparar fibras capilares dañadas o disminuir la irritación.
- Destacar que son "sin" otros ingredientes con mala fama, como parabenos, aceites minerales y un largo etcétera.
Muchas mujeres dudan a la hora de teñirse cuando están embarazadas. La mayor parte de los estudios, aunque son pocos, muestran que es seguro tanto para la madre como para el feto. En cualquier caso, si quieres minimizar el riesgo:
- Busca una habitación ventilada para aplicarte el tinte.
- Usa guantes durante la aplicación.
- Deja actuar el tinte el menor tiempo posible.
- Aclara el cuero cabelludo una vez que se ha aplicado.
- También puedes teñirte solo las puntas o darte mechas, de esta forma el producto solo estará en contacto con el cabello y no con el cuero cabelludo.
- Leerse las instrucciones: Lo primero es leerse las instrucciones y respetar las reglas del fabricante.
- Cumplir los tiempos: Es muy importante que lo hagas y sobre todo que respetes el tiempo que te indican, ya que de no hacerlo puede que algunos de tus cabellos queden sin teñir o te queden el cabello teñido a la mitad. Ten paciencia. El resultado puede no ser visible antes de terminar completamente con la operación.
- Usa ropa vieja o cúbrete con una toalla. Basta una salpicadura de tinte para manchar irremediablemente la ropa. Una vez aplicado el producto, y bien aclarado, ya no existe el riesgo de manchar la ropa.
- Usa guantes para aplicar el producto, ya que los tintes pueden irritar o teñir las manos. Ten cuidado con las salpicaduras. Si, accidentalmente, entrara en el producto en los ojos, lávalos con mucha agua (no utilices colirio). Si la irritación no pasara, consulta con el médico o dirígete a urgencias. Puedes utilizar crema hidratante para proteger la piel alrededor del cuero cabelludo.
- Retira el producto del cabello. Hazlo enjuagándolo abundantemente bajo el grifo.
- Tira el resto. Cuando termines con el proceso, desecha lo que quede del producto. Una vez hecha la mezcla, el tinte pierde propiedades así que no lo guardes para más adelante.
- No utilices el tinte para teñir las pestañas o las cejas, ya que estos productos no están destinados a estar en contacto con los ojos.