platos preparados

Cómo elegir platos preparados

Una pizza, una tortilla, un gazpacho o cremas preparadas son una alternativa rápida para sacarnos de un apuro en la comida, pero a veces poco tienen que ver con los platos caseros en los que se basan: de ahí la importancia de escoger bien, seleccionando los productos de más calidad. Te ayudamos a acertar.

Guía de compra

La composición es clave

Los platos preparados pueden ser muy prácticos, pero no siempre son la mejor alternativa: son alimentos muy procesados, que a menudo cuentan con muchos aditivos en su preparación. Aun así, entre ellos hay muchas diferencias: es fundamental conocer su composición nutricional para que puedas elegir el más saludable.

  • El contenido en grasas puede ser determinante: escoge productos cuyo aporte en grasa saturadas idealmente no supere el 5%.
  • A menudo estos platos tienen demasiada sal: asegúrate de que no excede el 1,25% (mejor si se queda por debajo del 1%).

En nuestros análisis de algunos de los platos preparados más populares del mercado seleccionamos productos de las principales marcas y, entre otras cosas, revisamos qué ingredientes llevan, para poder determinar hasta qué punto se asemejan o no a las elaboraciones caseras. Localiza los mejores y nuestras Compras Maestras, para poder identificar los platos preparados que realmente valgan la pena desde el punto de vista calidad y precio.

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Tortilla

La tortilla de patatas, la clásica tortilla española, con o sin cebolla y a veces con otros ingredientes, es un clásico que nunca falla. Pero si no quieres pelar, freír, mezclar... siempre puedes echar mano de una tortilla preparada.

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Pizza

Aunque nada es comparable a una auténtica pizza italiana artesana, las pizzas preparadas, refrigeradas o congeladas, se han hecho un hueco en nuestros hogares y siempre son una cena bien recibida.

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Fabada

Las conservas de legumbre, como la popular fabada asturiana, están entre las más apreciadas por muchos consumidores. ¿Están sus ingredientes a la altura?

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Gazpacho

No hay verano sin gazpacho. La famosa sopa fría es un básico de nuestros menús veraniegos. Quienes no se animan a hacerlo en casa, pueden optar por comprarlo preparado, porque tienen donde elegir.

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Salmorejo

Junto al gazpacho en sus distintas variedades, el salmorejo se ha puesto de moda: en los lineales de refrigerados se encuentra todo el año, pero no todos son iguales:

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Masas precocinadas

Las masas precocinadas, de hojaldre, masa quebrada, para pizza... son la base para muchas elaboraciones dulces y saladas. Sin embargo, su composición no es la misma que las de las masas caseras: la calidad de las grasas puede ser determinante.

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Preguntas frecuentes

Resolvemos las dudas más habituales de los consumidores sobre platos preparados.

¿Los platos preparados son una alternativa a las elaboraciones caseras?

Estos platos preparados son una ayuda, un apaño si no tenemos nada preparado para comer... Pero antes de elegir uno de ellos comprobar que su aporte en grasas saturadas y sal no sea muy alto.

¿En qué te tienes que fijar a la hora de adquirir un plato preparado?

Toda la información que aparece en el envase es importante. La lista de ingredientes te da una idea de con que está preparado: cuanto más corta mejor, y con el menor número de aditivos posibles. Tienes que fijarte en la forma que tienes que conservar el plato preparado en casa y cómo prepararlo. No te olvides de comprobar la fecha de caducidad o de consumo preferente.

¿Cómo se calienta un plato preparado?

Precocinados y platos preparados deben calentarse o terminar de cocinarse siguiendo escrupulosamente las indicaciones que da el fabricante. Lógicamente, cuando prepares el plato preparado tienes que seguir las mismas medidas de higiene que con cualquier otra preparación en casa.

¿Qué puedes hacer si no consumes todo el plato preparado?

Algunos fabricantes dan unas indicaciones para conservar el producto una vez abierto. Síguelas.

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